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Así acosaron a un Jefe de Servicio de la Junta del que creían que era de Podemos

Luis Escribano desvela cómo el socialismo andaluz maneja instituciones sin importarles la norma.

  • La alcaldesa de Albuñol, María José Sánchez Sánchez (PSOE), manifestó en sesiones del Pleno municipal de 2017 que era amiga del Director General (PSOE), y que celebró mi destitución a las tres horas de su llamada telefónica al Director mostrando su indignación por recibir mis propuestas denegatorias de subvenciones
  • En los audios de dichas sesiones que pueden escuchar en este capítulo, la alcaldesa de Albuñol realiza declaraciones presuntamente injuriosas y calumniosas sobre hechos concernientes al ejercicio de mi cargo, faltando a la verdad
  • El Director General, Juan Manuel Fernández Ortega, promovió la modificación de las bases reguladoras de las subvenciones tras mi cese, a fin de eliminar requisitos y facilitar la concesión de subvenciones a dicho municipio granadino, al que ha concedido tres subvenciones
  • La Magistrada María Fernanda Mirmán Castillo adulteró los hechos en la Sentencia del proceso judicial de mi cese para intentar justificar que no existió desviación de poder por parte de la Viceconsejera de la Presidencia y Administración Local

 

Como ya les avancé, este nuevo capítulo está repleto de sorpresas, con hechos que les revelarán una vez más los modus operandi del Gobierno presidido por Susana Díaz y de su Administración, que en nada ha cambiado respecto a los anteriores de Chaves y Griñán.

 

Comenzaré este relato con los hechos ocurridos la misma mañana en la que el Director General de Administración Local me comunicó mi cese como Jefe de Servicio.

 

Al parecer, la alcaldesa del municipio de Albuñol, María José Sánchez Sánchez (PSOE), llamó por teléfono al Director General, Juan Manuel Fernández Ortega (PSOE), a primera hora de la mañana del 11 de noviembre de 2016, mostrándole su indignación porque el día anterior había leído la comunicación de una propuesta provisional de una subvención suscrita por un servidor como instructor del expediente (según el sistema informático, fue leída a las 21:12 h del día 10-11-2016).

En dicha propuesta se indicaba que no procedía reconocer la condición de beneficiario provisional al Ayuntamiento de Albuñol por incumplimiento de las bases reguladoras de las subvenciones, proponiendo su denegación y concediendo un trámite de audiencia para presentar alegaciones, en su caso. En total fueron cinco las propuestas provisionales denegatorias que se notificaron al Ayuntamiento, cuyos motivos eran similares.

Las subvenciones que se habían convocado tenían como objeto financiar las actuaciones necesarias para la restitución de infraestructuras e instalaciones municipales dañadas por situaciones de emergencia, catástrofe o calamidad pública acaecidas en municipios andaluces, con el fin de restablecer el normal funcionamiento en las zonas siniestradas de los servicios públicos prestados mediante dichas infraestructuras e instalaciones.

Al terminar de hablar con la alcaldesa de Albuñol, el Director General me llamó para que fuera a su despacho, mostrándome de forma airada su desacuerdo con las propuestas provisionales denegatorias antes de conocer los antecedentes y los fundamentos de Derecho que contenían. Al parecer se había comprometido con la alcaldesa a conceder las subvenciones solicitadas, por un importe total cercano a los 120.000 euros.

A continuación me pidió copia de las propuestas provisionales denegatorias, y le informé que el Ayuntamiento podía presentar alegaciones si no estaba de acuerdo con los fundamentos de las propuestas, tal como establecían las bases que regulaban dichas subvenciones. De hecho, así actuaban otros Ayuntamientos cuando recibían propuestas de ese tipo, y no llamaban al Director General para mostrarle su indignación, sino que nos llamaban a los funcionarios del Servicio para aclarar dudas sobre la documentación a presentar con las alegaciones.

 

A las dos o tres horas de este incidente, me llamó el Director General para que fuera de nuevo a su despacho, y una vez allí me dijo que “no le gustaba como se trataba en el Servicio a los Ayuntamientos”, y que “estaba cesado”.

 

Tras mi cese, el Ayuntamiento de Albuñol presentó alegaciones en tres de los expedientes, y se redactaron propuestas definitivas de resolución proponiendo la denegación de las solicitudes, que fueron resueltas por el Director General denegándolas. En los otros dos expedientes se propuso el desistimiento (el Ayuntamiento no presentó la documentación necesaria), resolviéndose en el mismo sentido. Por tanto, mis propuestas provisionales no estaban desencaminadas jurídicamente, a pesar de la indignación de la alcaldesa (PSOE) y del Director General (PSOE).

Antes de relatar lo que ocurrió meses después, debo aclarar que estas subvenciones se venían convocando desde el año 2013 al amparo de unas Bases reguladoras aprobadas por el titular de la extinguida Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales, y que en 2016 fueron sustituidas por unas nuevas Bases Reguladoras promovidas por el Director General y aprobadas por el Consejero de la Presidencia y Administración Local, Manuel Jiménez Barrios. Estas últimas Bases reguladoras exigía requisitos diferentes a las anteriores aprobadas en 2013.

El Ayuntamiento de Albuñol las había solicitado en la convocatoria del año 2015, y tras concederse a numerosos municipios y agotarse el crédito, no se concedió ninguna subvención a Albuñol. En el año 2016 volvió a solicitarlas en la nueva convocatoria para las mismas actuaciones, que fue uno de los motivos por los que propuse denegarlas en aplicación de las bases reguladoras.

En el proceso judicial sobre mi cese presenté numerosas pruebas que acreditaban la desviación de poder en la actuación de la Consejería de la Presidencia y Administración Local, y las pruebas de este caso mostraban claros indicios. Entre ellas deben destacarse dos archivos de audio correspondiente a las grabaciones de dos sesiones del Pleno municipal de Albuñol (sesiones de 05-07-2017 y 26-10-2017), publicados por el propio Ayuntamiento en su página web (enlace).

A continuación les dejo con partes de los audios de ambas sesiones, en los que intervienen un concejal del Ayuntamiento, que efectúa dos preguntas concretas sobre las subvenciones citadas, y la alcaldesa de Albuñol. Igualmente, al final de este capítulo se publican las transcripciones escritas de los audios, para facilitar su seguimiento.

Audio del Pleno celebrado el 5-07-2017

 

Audio del Pleno celebrado el 26-10-2017

 

En dichas intervenciones, la alcaldesa de Albuñol deja clara su relación de amistad con el Director General, así como su desprecio hacia un servidor. Sin duda, fue el detonante de mi destitución. La alcaldesa me culpa públicamente de haber denegado las subvenciones a Albuñol, cuando dicha decisión corresponde al Director General. Además, mi función es aplicar las bases reguladoras y la normativa sobre subvenciones que han aprobado los órganos competentes, y fue lo que hice.

Hay párrafos de las intervenciones de la alcaldesa en dichos Plenos que explican y revelan con meridiana claridad por qué el Director General me comunicó el cese a las dos o tres horas de la llamada de la alcaldesa. Un ejemplo de ello lo tenemos cuando la Alcaldesa expone en el Pleno de 5 de julio de 2017 que:

“….bajo mi punto de vista, ese Director General, alcalde de Chauchina y senador del grupo socialista evidentemente y ahora ostenta el cargo de Director General, y además lo ostenta de manera muy adecuada, hizo una buena cosa, que fue destituir a ese puesto de libre designación, que lo único que hacía era dar por saquillo a los pueblos que habían tenido catástrofes naturales… yo no conozco personalmente al funcionario Luis Escribano del Vando, pero su destitución la celebré, la celebré… cuando la gente ostenta cargos en la Administración, sobre todo puestos de libre designación, deben ser más sensibles con los ciudadanos, más sensibles, y no estar fijándose en tonterías…”.

O igualmente en el Pleno de 26 de octubre de 2017, en el que declara que:

 

“…ya no es Jefe de Servicio porque un Director General socialista, amigo mío, Juan Manuel Ortega…este sí es amigo mío, Juan Manuel Ortega, lo destituyó por capullillo…”.

 

Observen que mientras el Director General me lanzaba frases como “no mires con lupa los expedientes” o “no hagas ningún informe por escrito”, a fin de evitar propuestas denegatorias ajustadas a Derecho, la alcaldesa de Albuñol se expresa en el mismo sentido cuando dice que los funcionarios que ocupan puestos de libre designación deben ser más sensibles con los ciudadanos…y no estar fijándose en tonterías…, es decir, aplicar la normativa es, según esta alcaldesa, “fijarse en tonterías”.

Que un cargo público sin formación académica alguna pudiera decir despropósitos como los expresados por la alcaldesa de Albuñol en los citados Plenos podría entenderse hasta cierto punto, pero que lo diga una Licenciada en Económicas y funcionaria del Ayuntamiento del municipio de Gualchos (nada menos que de la Intervención), como es la citada alcaldesa, no tiene justificación razonable.

Las declaraciones presuntamente injuriosas y calumniosas que ha vertido sobre un servidor –funcionario de carrera- sobre hechos concernientes al ejercicio de mi cargo faltan a la verdad en muchas de las afirmaciones que realiza: sabe que jamás podría denegar la subvención como Jefe de Servicio porque sólo tenía la atribución de realizar propuestas de resolución; nunca me he “reído” del municipio de Albuñol ni de ningún otro, ni he solicitado a dicho Ayuntamiento documentación de forma arbitraria, lo cual sería denunciable; nunca he estado afiliado a algún partido político, y menos aún he informado o propuesto alguna resolución en base a motivos de ideología política.

Tras mi cese, el Director General, Juan Manuel Fernández Ortega, promovió de nuevo la modificación de las bases reguladoras de estas subvenciones aprobadas en 2016, que finalmente fueron aprobadas para el año 2017 por el Consejero de la Presidencia y Vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios.
Con todo lo relatado, parece obvio que la petición de mi destitución por el Director General constituye una actuación arbitraria o caprichosa, carente de racionalidad y ajena al interés general. Sin embargo, fue absolutamente consentida por los superiores jerárquicos del mismo, que incluye al Vicepresidente de la Junta de Andalucía, Manuel Jiménez Barrios, al que un servidor dirigió su denuncia posteriormente.

Pero no ha acabado aquí el asunto. Tras mi cese, el Director General, Juan Manuel Fernández Ortega, promovió de nuevo la modificación de las bases reguladoras de estas subvenciones aprobadas en 2016, que finalmente fueron aprobadas para el año 2017 por el Consejero de la Presidencia y Vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios.

En las nuevas bases se han eliminado requisitos, entre ellos uno de los que motivaron mis propuestas de denegación de las solicitudes del Ayuntamiento de Albuñol. A ello hay añadir que en la convocatoria de 2017 se ha ampliado el periodo de acontecimiento de las catástrofes a los dos años últimos (en anteriores convocatorias el periodo era del último año).

 

De esta manera se ha facilitado al Ayuntamiento de Albuñol que pudiera solicitar de nuevo las subvenciones, como así ha ocurrido, según consta en las grabaciones del Pleno municipal de octubre de 2017.

 

Todos estos hechos los puse en conocimiento de la Magistrada María Fernanda Mirmán Castillo en el proceso judicial de mi cese, aunque en la Sentencia nada ha dicho al respecto. Lo único que obtuve de la Magistrada en la Sentencia fue una adulteración de los hechos para intentar justificar que no hubo desviación de poder. Dice la Magistrada en la Sentencia que “…no estimo acreditada la desviación de poder denunciada al constatar que el cese es inmediato a la llamada de la Alcaldesa de Albuñol y a las dos horas, “en caliente”, el Director le comunica el cese “porque no le gusta como trata a los Alcaldes”, lo que nada tiene que ver

 Hace poco tiempo he tenido conocimiento de la concesión al Ayuntamiento de Albuñol de varias subvenciones al amparo de las Bases reguladoras cuya modificación promovió el Director General tras mi cese 
con la rigurosidad en sus propuestas de resolución, si no al trato personal en las comunicaciones telefónicas del demandante y los Alcaldes cuando estos se interesan cómo sacar adelante resoluciones de subvenciones a sus municipios. El subrayado es mío.

Si observan ustedes, la Magistrada se inventa lo que me dijo el Director General. Este me dijo que “no le gustaba como se trataba en el Servicio a los Ayuntamientos”, no a los Alcaldes, como dice la Magistrada. Además, se inventa también lo del trato personal a los alcaldes en las comunicaciones telefónicas, porque no consta en ninguna prueba o alegación de la Junta sobre ese supuesto trato a los alcaldes por teléfono que no gustaba al Director. Siempre he tratado con respeto a todas las personas que han hablado conmigo, sean alcaldes o técnicos municipales o cualquier otra persona.

Hace poco tiempo he tenido conocimiento de la concesión al Ayuntamiento de Albuñol de varias subvenciones al amparo de las Bases reguladoras cuya modificación promovió el Director General tras mi cese (ampliando el periodo de las catástrofes a dos años). Se convocaron por Resolución de 22 de junio de 2017, y se ha concedido con fecha 18/12/2017 una subvención por importe de 87.413,01 euros, y con fecha de 19/12/2017 dos subvenciones por importes de 11.036,13 y 12.617,45 euros.

A mi juicio, pocas veces pueden encontrarse indicios tan claros como estos en un proceso judicial para demostrar una desviación de poder, y que el fin perseguido con el cese del recurrente era completamente ajeno al interés del servicio. Pero ya ven que la Justicia sigue amparando estos abusos de poder.

Les dejo a continuación con las transcripciones escritas de los audios. No obstante, les recomiendo que los escuchen con atención, porque revelan una intencionalidad clara de la alcaldesa de encumbrar a su amigo socialista, el Director General, y de tratar con absoluto desprecio, incluso mintiendo, a un servidor, funcionario de carrera que sólo cumplía con su deber.

No se pierdan los próximos capítulos. ¡Habrá mucho más!

 

ANEXO:

 

Transcripcion literal de lo que se dijo en el Pleno del Ayuntamiento de Albuñol