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Bonilla desestabiliza a Zoido imponiendo un cese en Sevilla

En uno de los peores momentos de la moderna Historia de España, en mitad de los preparativos más sensibles de lo que a partir del sábado suceda con Cataluña en materia de seguridad, el ministro del Interior ha tenido que desayunarse esta mañana con un enorme sapo crudo, sin hornear, posiblemente de los más indigestos que se ha tenido que tragar Juan Ignacio Zoido desde su alejamiento personal y político de Javier Arenas hace ya años.  No, no se trataba de la respuesta por carta de Carles Puigdemont al gobierno, que también, aunque eso le entra en el sueldo de ministro de Mariano Rajoy.

En Andalucía, en Sevilla, su ciudad, gentes del PP en el que Juan Ignacio lo ha sido todo y todos algo le deben, le atizaban una solemne patada donde más duele, pero en el trasero de alguien de su absoluta confianza política y que goza, sobre todo, de un enorme afecto personal. Sabría después Zoido que ni siquiera quien ha dado literalmente la patada, Beltrán Pérez, lo hizo de motu propio, sino “obligado y presionado por el presidente regional del partido”.

En efecto, Alberto Díaz, más de diez años siendo la sombra de Juan Ignacio Zoido en Sevilla, más amigo personal que colaborador político, ha sido cesado esta mañana del jueves como portavoz adjunto en el Grupo Popular del Ayuntamiento de Sevilla.

Se queda de concejal raso y percibiendo exactamente lo mismo que hasta ahora. También seguirá como vicepresidente provincial del PP de Sevilla. Circunstancias ambas que invitan a pensar en que los motivos de su cese, de los que se hablará más adelante, no obedecen a una falta grave en su labor como vice portavoz municipal.  

 

Beltrán Pérez, el brazo ejecutor.

 

El brazo ejecutor de la decisión ha sido el joven Beltrán Pérez, portavoz actual del PP, presunto alcaldable del arenismo para el año que viene e integrante de la mayoría vencedora del último congreso plagado de tensiones que se libró en el seno del PP sevillano hace solo unos meses.

No hay que ser politólogo para advertir la trascendencia política que tiene el cargarse, una vez lograda la calma interna del partido en Sevilla, a alguien avalado y apadrinado por el hoy Ministro del Interior; una decisión que Beltrán Pérez no toma por su cuenta, “Beltrán no es ni un loco ni un inmaduro” dicen fuentes populares que prefieren guardar el anonimato.

 

Pero, ¿qué ha hecho Alberto Díaz?

 

Pero, se preguntará el lector a estas alturas de crónica, ¿qué se supone que ha hecho el joven Alberto Díaz para merecer su fulminante cese como número dos del grupo municipal?

Según las fuentes consultadas en el PP de Sevilla el motivo que se ha arrojado a la cara de Díaz para su cese ha sido acusarle de haber filtrado al periodista Carlos Navarro Antolín del Grupo Joly el contenido de lo que el pasado martes publicó en su página La Caja negra, una de las ventanas periodísticas más solventes y leídas del panorama mediático sevillano y andaluz.  

Se trataba de lo dicho en privado por el dirigente regional Juanma Moreno Bonilla a los concejales sevillanos del PP en una reunión a puerta cerrada celebrada días atrás. Que se sepa ni el partido ni el ejecutor de esta decisión, Beltrán Pérez, han podido presentar prueba alguna que demuestre que Díaz sería el autor de la filtración de la grabación. Por lo que parece fue tras la reunión con los concejales que “alguien” le comentó a Bonilla que “Alberto manejaba mucho un teléfono durante la reunión” de lo que el líder regional del PP debió concluir que Díaz ha sido el que ha grabado y, por tanto, el que lo ha filtrado.

Algo, por otra parte, que a nadie del PP debiera sorprender a estas alturas porque no es la primera vez que Navarro Antolín accede a este tipo de documentos informativos y los publica en su página. Por cierto, en una ocasión se coló el contenido de una directiva provincial, filtración claramente beneficiosa para el grupo vencedor del congreso del PP de Sevilla donde está encuadrado el propio Beltrán.

 

¿Tan grave es lo que se ha filtrado?

 

¿Pero tan grave era lo que se había filtrado? Aunque lo suyo es leerse íntegro del artículo del colega Carlos Navarro, he aquí cinco interesantes pasajes que están transcritos con literalidad gracias a la grabación que se habría realizado durante la reunión. Unas afirmaciones en las que, como se verá, el presidente del PP-A muestra las debilidades del partido en Andalucía, pero sobre todo destapa las suyas propias.

 

Juanma M. Bonilla: “Yo no puedo plantearme un gobierno con Ciudadanos si aquí no ocurren una serie de cosas. La primera es que ganemos en la capital, evidentemente”.

 

­–“Estamos ya en situación electoral. Los acontecimientos que se están produciendo nos llevan a un tiempo electoral en Cataluña e incluso a nivel nacional, lo que condiciona a su vez todos los escenarios. Las elecciones municipales serán el último domingo de mayo. Y las autonómicas, en teoría, el último domingo de marzo, lo que implica que sólo habrá ocho semanas de diferencia. Si se descuenta la Semana Santa y la Feria son sólo seis. Si nos va mal en las autonómicas nos irá mal en las municipales por cuestión de dinámicas ascendentes y descendentes”.

 

–“La sociología electoral nos habla de dinámicas caprichosas, nos dice que si son ascendentes te suben y entramos en una dinámica de optimismo, pero si no lo son… Vamos a tener con las autonómicas una primera vuelta, que será clave para generar una dinámica ascendente. Las autonómicas nos la tenemos que tomar como algo muy nuestro, porque de ellas va a depender la probabilidad real de gobernar Sevilla”.

 

–“¿Tenemos posibilidades reales de gobernar Sevilla? Evidentemente que sí. Tenemos posibilidades reales. Y no lo digo yo, sino la demoscopia sociológica. Tenemos posibilidades. Sevilla no es Andalucía, donde ganamos una vez y no pudimos gobernar desgraciadamente. En Sevilla hemos gobernado con Soledad Becerril y con la mayoría histórica de Juan Ignacio Zoido. Aquí hay mucha gente que ya ha cogido una vez la papeleta del PP y, como la ha cogido, son susceptibles de que la cojan otra vez. Es verdad que Juan Espadas es un hombre moderado, una persona agradable, el típico hombre que se esfuerza por agradar a todos. A mí me ve y desde la otra punta me dice: ‘Presidente, ¿cómo estás?’. Juega a eso. A ser centrado, moderado, agradable y sin aristas porque juega a ser triangular. Tiene una estrategia clarísima de triangulación electoral. Va formando mayorías en función de las necesidades y del momento, pero es que además es un tío que ya de por sí tiene la marca PSOE, que le da apoyos importantes, y después va cogiendo de Ciudadanos, de nosotros, de las abstenciones… y va haciendo sus mayorías. Esto le ha funcionado en la primera etapa de la legislatura, pero en la segunda no le está funcionando”.

 

–“Tenéis que pasar a una actitud de mayor confrontación, y de mayor coordinación con el grupo parlamentario y del propio PP autonómico. En Sevilla tenemos que volcarnos todos. Hay que hacer un esfuerzo brutal y titánico. Sevilla es un símbolo, Sevilla es prioritaria. Yo no puedo plantearme un gobierno con Ciudadanos si aquí no ocurren una serie de cosas. La primera es que ganemos en la capital, evidentemente. Y tenemos que ganar en el Aljarafe y mantener el tipo en localidades como Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra. Sevilla es fundamental. Sin Sevilla no podemos hacer nada, el peso de la capital es evidente. En Sevilla nos jugamos el tipo. Vamos a organizar un calendario de actividades muy potente”.

 

­–“Mi sensación es que esto se retrasa (la nominación de candidatos municipales) y no tiene ningún sentido. No lo digo por Sevilla solamente. En Huelva tenemos un grupo machacado. Pienso también en Granada, donde tenemos posibilidades reales de volver a gobernar, una ciudad conservadora donde tenemos el melón abierto. Pienso en la propia Málaga donde hay una circunstancia ahí, que qué hacemos o no hacemos… que al final nos puede llevar a que nos metamos una hostia. Al final, coño, cuanto antes tengamos a la gente trabajando con certidumbre, mucho mejor”. Al valorar la influencia del desafío separatista catalán en la vida del partido, estuvo muy claro: “Si sale bien, el PP saldrá reforzado como marca. Si esto sale mal, al PP como marca lo cogen por los tobillos y nos tiran para abajo. Yo lo he vivido en 2015 y te hace perder muchas posibilidades. Yo confío en el presidente, las cosas las está haciendo con equilibrio y mesura. Las cosas pueden salir bien. Todos estamos bajo el paraguas de la marca”.

 

 

Bonilla ante su propio espejo

 

Cuentan que el martes, cuando Moreno Bonilla se miró en su propio espejo al leer a Navarro, pilló un rebote de mil pares de narices. De hecho, aseguran en el partido, fue el cabreo monumental de Bonilla el que activó el cese, ordenando a Beltrán Pérez que se actuase de forma ejemplar contra el supuesto filtrador, Alberto Díaz, sobre el que alguien le habría dicho al concluir la reunión que parecía que hacia cosas con el móvil durante la misma. Esa, parece ser, habría sido la única “prueba” que habría sopesado el político malagueño para castigar al vice portavoz, amigo y protegido de Juan Ignacio Zoido.

“Ha sido un verdadero acoso el que Juanma ha ejercido sobre Beltrán para que cesara a Alberto Díaz” relatan fuentes conocedoras de las tensas horas que precedieron a la presentación del escrito de cese.  La presión telefónica de Moreno sobre Beltrán “ha sido brutal y hasta el último minuto” afirman. La presidenta del PP de Sevilla, Virginia Pérez, que se encuentra de baja médica, parece ser que también intervino telefónicamente ante Bonilla para pararlo todo, aunque sin éxito  en el sentido de oponerse al despropósito que suponía el castigo público que debilitaba a su vicepresidente provincial y, consecuentemente, la dificil estabilidad lograda en el partido tras las escaramuzas primaverales. Juanma Moreno, pese a todo, siguió adelante exigiendo obsesivamente la cabeza de Alberto Díaz.

 

En caliente y sin meditar

 

De esa forma, tan en caliente y tan poco meditada, el más alto dirigente regional del PP en Andalucía daba luz verde para el corte de cabeza del que él consideraba responsable de la filtración y para que sirviese de escarmiento ejemplar.

(Moreno Bonilla vive obsesionado con algunos periodistas, llegando incluso a prohibir a cuadros y dirigentes del PP que mantengan contacto con los mismos. Y lo más cutre es que, la mayoría, le hacen caso, incluidos los diversos jefes de prensa que ha tenido hasta ahora el PP andaluz bajo su presidencia, puesto en el que sigue sin acertar)

Lo que siguió después ya se conoce. Esta mañana a las 11 se anunciaba el cese formal de Alberto Díaz y se materializaba ante el registro municipal.

Alberto Díaz, que de pronto se sintió acusado, procesado y condenado, sin una sola prueba de su supuesta deslealtad al partido, empezó a pedir explicaciones de lo sucedido con la amenaza de acudir, llegado el caso, a la vía judicial por acusarle de la comisión de tan grave acto que podría estar castigado hasta con la expulsión.

La primera reunión de Alberto Díaz, acompañado por el Secretario General provincial, fue con la presidenta del PP de Sevilla Virginia Pérez. Fuentes próximas a Díaz aseguran que Pérez calificó lo sucedido como un “grave error político” al que ella misma se había opuesto, desmintiéndole tajantemente que el partido en Sevilla estuviese detrás avalando de esta operación. Muy al contrario, le explicó que incluso le había trasladado al propio Moreno Bonilla su opinión contraria, además de decirle que pensaba seguir contando con Alberto Díaz como vicepresidente del PP en Sevilla.

 

Bonilla desmiente, pero no da la cara

 

De la misma forma Alberto Díaz habla posteriormente con Loles López, número dos regional del PP andaluz, mujer fundamentalmente dedicada al desatasco de los marrones del presidente regional. Las mismas fuentes aseguran que la Secretaria General no solo ha desmarcado a los órganos regionales del partido de esta movida, también al presidente regional Juanma Moreno Bonilla. López habría reconocido a Díaz que Bonilla, sí, estaba molesto con la filtración y que habría exigido ejemplaridad para con quien resultase responsable, pero desmintiendo categóricamente que Bonilla dijese el nombre y apellido de Alberto Díaz. Algo que, como queda explicado, es manifiestamente falso o inexacto y, por tanto, injusto, a tenor de lo que cuentan las diversas fuentes consultadas.

 

“Cobarde, mentiroso e injusto”

 

“Lo peor de todo -escucho al teléfono una voz del PP sevillano, para mí solvente- no es el cese de un cargo municipal que, si me apuras, es un mojón y una insignificancia; lo peor de todo esto es constatar como la cobardía, la mentira y la injusticia se han instalado en el comportamiento de Juanma en esta historia”.

En efecto, que Bonilla haya hecho saber a través de Loles López que él nada tiene que ver con este cese, pese a haber estado presionando brutalmente a Beltrán Pérez para que lo ejecutase, demuestra una cobardía sublime e indigna de alguien que aspira a gobernar algún día a los andaluces.

¿Por qué da marcha atrás y se oculta Juanma? pregunto a un diputado andaluz del PP que responde con guasa: “Juanma seguramente no se acordó de que el ministro del Interior está metido de lleno en serias cuestiones de Estado, por eso le pareció bien tocarle las narices a Juan Ignacio. Además, date cuenta que con esta operación ha puesto en la parrilla de asar a dos posibles candidatos, Beltrán (Pérez) apoyado por Arenas y Alberto (Díaz), apoyado por Zoido. Deja la vía expedita para colocar a quien todos consideran su favorito, el flamante senador Toni Martín”.

Así, el dirigente popular, que vino a Sevilla a recordarle a sus concejales lo importante que es la capital para las autonómicas, ha logrado desestabilizar el delicado statu quo del PP sevillano. Desde luego a quienes están en la pomada de lo sucedido lo que más les indigna e irrita es “el gesto cobarde de Bonilla”, negando algo que todos saben en el partido que es verdad, “encima de injusto y mentiroso, un cobarde” concluyen.

 

Nota final.- Una vez  publicado el articulo, considero necesario añadir una reflexión personal a propósito de Juan Ignacio Zoido.

Quienes hayan leído algunos de mis artículos o conferencias, sabrán que soy y he sido muy critico con el político Zoido por su actuación en sus años como alcalde. El acoso que, siendo alcalde de Sevilla, permitió y toleró contra periodistas y sus medios es algo difícil de olvidar, aunque el tiempo que pasa deja kilos de perdón y algo de olvido en el camino. No obstante, hoy Juan Ignacio Zoido es ministro del Gobierno de España y, de todos los miembros del ejecutivo, él sea posiblemente, junto a su amiga Maria Dolores Cospedal y la vicepresidenta, el que maneje el material  más sensible y delicado de la crisis del 155 que en horas arrancará en España, tras el Consejo de Ministros extraordinario de mañana sábado. En manos de este juez en excedencia están, nada más y nada menos, que los CFSE y lo que cuelga en materia de seguridad y orden público.

Partiendo por tanto de que nos hallamos ante un túnel largo y negro para la democracia española, nunca antes atravesado, parece una grave irresponsabilidad la cometida en Sevilla para con una persona a la que Zoido quiere como si fuera el hijo que le arrebató el destino en una carretera. El que no se haya contemplado este factor sicológico tan íntimo y personal del Ministro  del Interior,  ampliamente conocidos por mucha gente en Sevilla dentro y fuera del partido, solo pueden significar dos cosas: torpeza o mala leche. Gobernar con arrebatos, a golpe de testosterona, sin calibrar los efectos de las decisiones, sin hacerle caso a los consejos de los prudentes, conduce a una situación que, en circunstancias normales, sería una bronca más por el quítate tú para que me ponga yo. Pero con la que está cayendo, encabritar o desconcentrar  al que manda en los guardias y policías, es de una insensatez que será difícil olvidar, especialmente para Zoido. He criticado y criticaré al político Juan Ignacio Zoido. Hoy me sumo a los millones de españoles que esperamos que prevalezca la cordura y la proporcionalidad en las órdenes que le toque impartir a partir del sábado en Cataluña. Será prudente, le deseo suerte y aciertos. Los españoles nos jugamos mucho en este envite./ 20 octubre de 2017/ 1,53 AM.