Llegó nuestro Día D. No sé muy bien, estimado lector/a, cuándo llegarás a este nuevo enclave informativo y de opinión que nace hoy para ti dedicado a Andalucía y a las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla. En cualquier caso, sea bienvenido al rodaje inicial de Confidencial Andaluz, en esta segunda etapa en digital.
Salimos con lo puesto, es decir en una fase beta sometida a todas las torturas que Santa Tecla permita en la red, pero hemos decidido aparecer sigilosamente para poder testear el funcionamiento del periódico una vez colgado en el servidor que nos aloja. Y, entre nosotros, porque este tipo de proyectos, si esperas a corregir todo antes, quizás no salgas nunca.
Como el periodista más veterano de los que se han embarcado en esta pre-aventura profesional, me apresuro a pedir clemencia y comprensión ante los posibles y seguros fallos que intentaremos corregir en los próximos días. Nacemos sin financiación y las carencias de medios son más que evidentes. Claro que, a cambio, no tenemos consejo de administración que nos exija, simplemente nacemos con la voluntad de hacer un periodismo responsable y libre de presiones inconfesables de espaldas a los ciudadanos. Los ciudadanos y no los políticos serán los que, llegado el caso, decidan apostar por la subsistencia de un producto informativo como este, que desde hoy empieza a crecer.
En esta primera estación del Confidencial Andaluz en versión digital, en la sección El Sismógrafo hallarán mi puntual comentario, varios días en semana, sobre temas de la actualidad de Andalucía.
Así que les dejo adentrarse en las páginas de este modesto periódico para que disfruten –o no– de las cosas que empezamos a contarles.
No sabemos cuánto va a durar esta aventura periodística ejerciendo como administradores del Derecho a la Información de los ciudadanos. Quizás mucho tiempo, quizás poco. Puede que incluso haya gente que quizás crea que vale la pena apoyar este tipo de proyectos y lo haga. Quizá, quizá, quizá…
Lo que sí tenemos claro el puñado de personas que hemos dado el paso para que C.A. sea de nuevo una realidad al servicio de la gente, es que el mucho o poco esfuerzo habrá valido la pena. Aunque solo sea para despertarse muchas mañanas proclamando buenos días Libertad.
Pepe Fernández