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Día de Andalucía, la encuesta electoral y emociones andaluzas

El socialismo andaluz necesitará un socio. Lo sabe y lo está estudiando.

Cuando me traslade a vivir a Andalucía, solo había visto celebraciones como el Aberri Eguna. No es extraño, por tanto, que me gustara el Día de Andalucía. La denominación prometía. Ni patria como en Euskadi, ni nación como la Diada, una sencilla y practica que dejaba entrever lo que realmente era: un día de no hacer nada y, con suerte, un puente. El puente del día de Andalucía. ¿Qué vas a hacer el puente del día de Andalucía que dura de lunes a lunes? Nada. Bien, eso es de mucha más ayuda que los libros de Coello.

Temo que se pierda. He visto con horror, que ya hay por ahí una celebración de día nacional de Andalucía en diciembre. El nacionalismo es contagioso. Si no estamos prestos a defender esta esencia nohacernadista, el 28F acabará convertido en uno de esos días nacionales de largas peroratas sobre la injusticia, una retahíla de lamentos y un montón de amargura mientras docenas de personas se cogen de la mano para construir los muros de la patria ¿Por qué, a ver, por qué cogerse de la mano y formar cadenas? No los conoces, no sabes si se han estornudado en esa mano o vete a saber dónde la han metido y es como se trasmiten los virus.

Afirma que el PSOE sacará 14 puntos al segundo y este será Ciudadanos.

Esto pensaba yo, que no he tenido puente, cuando apareció el Estudio General de Opinión Pública de Andalucía, Egopa, una encuesta que a nivel andaluza sería como la del CIS. Afirma que el PSOE sacará 14 puntos al segundo y este será Ciudadanos. Dicho así, puede parecer un supertriunfo de Susana Díaz, un chúpate esa Pedro que vienes a celebrar el acto del día de Andalucía sin que nadie te haya invitado. Aunque eso sí, esta vez no te vamos a apagar el aire acondicionado como en aquella visita de julio, que luego tus followers lo critican. Ahora te lo vamos a poner y a 19 grados que estés fresquito.

Por su parte, Juanma Moreno, el lider del PP por si el nombre no dice nada, no se cree el resultado. Mal. Decir eso y que todo el mundo se diga, incluso si querer, eso es porque le va a ir fatal es todo uno. Y bien no parecer irle, no. Puede haber voto oculto, gente que no dice que votaría al PP pero eso debería intranquilizar más. ¿Qué has hecho para que tus votantes no se atrevan a reconocerlo? Lo cierto es que no logra conectar y su partido ya no puede sustituirle. Será un poco, un que sea lo que Dios quiera.

Ciudadanos es feliz, aunque quizás no tanto su actual líder, porque su partido se plantea la urgencia de reforzar liderazgos. Un refuerzo que, normalmente, no consiste en que te ponen ayudantes, sino en que te quitan a ti.

Le sacará 14 puntos al siguiente, pero la suma  de votos , según el Estudio, de PP y CS les supera. No suma apoyos, lo que sucede es que a derecha e izquierda los electores se resitúan.

Podemos baja, abandonado ya hasta el deseo de asaltar los cielos. Mira que se le advertía. A ver si los españoles, a los que al final vas a tener que pedir el voto, se van a tomar a mal esa pasada de tuerca que lleva a que crean que les desprecias, que lo que ellos son lo consideras risible, mientras gritar visca Catalunya lliure i soberana es preocuparse de las cosas que realmente importan, por citar a Iglesias.

Y aquí tenemos a Izquierda Unida, que bien podría recoger el voto que se va de Podemos. Alberto Garzón podría, quizás, abandonar la obsesión que le ha dado con lo del ciudadano Borbón. Estuvo bien, fue profundo al tiempo que gracioso. Si además le hubiera llamado Felipe Capeto, lo parte. Pero ya está agotada, no puede estar todo el día con eso y centrarse en las cosas que realmente importan (amo esa frase).

Y así regresamos al PSOE. Le sacará 14 puntos al siguiente, pero la suma  de votos , según el Estudio, de PP y CS les supera. No suma apoyos, lo que sucede es que a derecha e izquierda los electores se resitúan.

El tema preocupa, y más en los escalones inferiores de la pirámide socialista. ¿Quién sería el socio y qué pediría? Izquierda Unida…

Esto es un problema, porque habrá que gobernar, una vez más. El fantasma de las elecciones pasadas, que tantos disgustos dio a Susana Díaz, reaparece. Es entendible que no desee adelantar las elecciones. Tras las elecciones andaluzas van las municipales, así que se queda sin investidura hasta que estas pasen. Como la otra vez. Solo faltaba adelantar las elecciones a noviembre para que los quebraderos de cabeza, y las promesas que deberá hacer, sean mayores porque ocuparían más tiempo.

El socialismo andaluz necesitará un socio. Lo sabe y lo está estudiando. Casi con la misma intensidad que dedicó -y hay quien dice que aun dedica- a desentrañar quien voto, quien no voto, a quien pudo votar cada uno, en las primarias de la agrupación socialista de la capital almeriense, donde ganó la secretaria general un miembro de la ejecutiva federal de Pedro Sánchez.

El tema preocupa, y más en los escalones inferiores de la pirámide socialista. ¿Quién sería el socio y qué pediría? Izquierda Unida, que ya lo fue tiene el inconveniente de la forma un poquito desleal como acabó la colaboración anterior. Pero seguro que han aprendido de aquello. El trabajo de fontanería es apartarles de Podemos y no será tan difícil viendo lo poco que gustó en Andalucía esa alianza.

Está, también, Ciudadanos. Este exigirá más porque tiene más estabilidad que ofrecer. Un drama humano. Si, humano, porque las instituciones que reciba en la Administración andaluza son procesión de cesantes -asesores, cargos- Un poder que se reduce, menos que repartir, más resentimiento, y su corolario de unos cuantos más engrosando las listas de desafectos en los procesos internos del partido.

Bien, se acabó el recreo, este año promete emociones andaluzas.