Los seísmos se suceden unos tras otros y los expertos dudan de la seguridad de nuestros edificios ante las catástrofes
No se paran los sucesivos terremotos en nuestra Comunidad Autónoma, pero ¿estamos prevenidos si la catástrofe nos sacude? Es una pregunta clave que buena parte de los andaluces nos hemos preguntado durante estas primeras semanas del año. Los expertos en la materia consultados coinciden en que no, en que no estamos ni prevenidos ni cumplimos con los requerimientos de seguridad pertinentes para este tipo de accidentes y de catástrofes. Existen normas y protocolos sí; no obstante, el rigor en el cumplimiento de estos preceptos y de estas recomendaciones brilla por la ausencia, según las fuentes consultadas.
Confidencial Andaluz ha hablado con Ricardo García Arribas, ex presidente de la Asociación Española de Ingeniería Sísmica. El pasado jueves, 28 de enero, García Arribas ofreció una ponencia que ha despertado el interés de los medios de comunicación. En relación con los terremotos producidos en Andalucía en las últimas semanas, García Arribas fue claro y conciso: “el 75 % de las viviendas cumplen con poco rigor la normativa de construcción sismorresistente”.
Según cuenta este especialista en la ingeniería sísmica, a la pregunta de cuáles son los fundamentos en que se asienta la seguridad de una vivienda, “la seguridad de los edificios dependen de la estructura, de la forma y de los elementos no estructurales”. El problema que advierte García Arribas es que “en general, en casi la totalidad de los edificios hoy construidos, el diseño de la estructura no cumple con los requisitos del capítulo IV de la Norma de Construcción Sismorresistente. Por ejemplo, todo lo que pasó en Lorca han sido infracciones e incumplimientos del capítulo IV de la norma vigente en la materia de construcción sismorresistente. Se pudo haber evitado”, narra el experto en ingeniería sísmica.
Dos son los principales asuntos que inquietan a los estudiosos y a los profesionales de la ingeniería sísmica y de la arquitectura, asuntos que debieran de preocupar a la población: por una parte, en palabras del expresidente de la Asociación Española de Ingeniería Sísmica, “el problema es que cuando se calcula la estructura sobre la que se construye el edificio, se hace sobre un modelo físico que no se corresponde con la realidad”; por otra parte, “una comisión dependiente del Gobierno Central redactó la Norma de Construcción Sismorresistente, cuya coordinación desempeña el Instituto Geográfica Nacional, que a su vez se encuentra tutelado por el Ministerio de Fomento. Estos son los primeros responsables de la elaboración de la norma y cuidar de su cumplimiento. Cumplimiento que no siempre es tal, a vista de los acontecimientos que venimos padeciendo estos días”, relata García Arribas.