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Patricia del Pozo destruye la cultura en Andalucía

Cada vez que aparece Patricia del Pozo para hablar de cultura en Andalucía veo a François Truffaut en Farenheit 451.

 

En la comunidad autónoma a la cola de salarios y pensiones, a la cola en cobro de prestaciones por desempleo, a la cola en renta por persona, a la cabeza en ciudades pobres, a la cabeza en barrios pobres, a la cabeza en el umbral de la pobreza y líder absoluto del paro, muchos nos temíamos que la llegada del “trifachito” al gobierno regional significara un golpe mortal a la cultura en Andalucía. Y parece que no nos equivocábamos en ello. La actual consejera de cultura, puesta “a dedo” y cuyo único mérito es ser del núcleo duro de Javier Arenas, está esquilmando la cultura en Andalucía retrotrayéndola a los tiempos oscuros del más rancio post franquismo. Cada vez que aparece Patricia del Pozo para hablar de cultura en Andalucía veo a François Truffaut en Farenheit 451. Hacen falta iniciativas en Andalucía para fomentar la cultura y la lectura para no caer en la barbarie. Poner precio a los museos en Andalucía significa que el actual gobierno ni cree ni apoya la cultura, ni cree en la historia de su propio pueblo. 

El lema de “menos estado y más sociedad” lo pronunciaba Arenas reiteradas veces cuando era candidato a la Junta de Andalucía. El neoliberalismo confeso del líder del “clan de Antares”, conformado por Antonio Sanz, Patricia del Pozo y Macarena O´neill, penetró capa a capa en sus discípulos políticos hasta formar parte de su ADN. Eso significa que el estado se reduce a su mínima expresión y la empresa privada se sitúa en el escenario para dar los servicios que el estado deja de prestar. Bendodo, del clan de los boquerones, otro discípulo amamantado por Arenas y hoy el Tigelino de San Telmo, también cree en ese discurso donde la ciudadanía debe pasar por caja y, sobre todo, repartir a escote entre la población el costo de los servicios públicos. No conviene olvidar que Javier Arenas es un funcionario en excedencia del grupo A2 de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.

 

Los graves problemas de los museos en Andalucía.

Los museos públicos andaluces arrastran graves problemas los últimos años y por los que ha pasado de puntillas la consejera de cultura, entre ellos la falta de personal. Los cierres del conjunto arqueológico de Itálica en Santiponce han sido una constante en los últimos años por falta de vigilantes, como también hubo cierres puntuales en Medina Azahara, entre otros muchos museos andaluces. A lo que se añade la falta de mantenimiento de que sufren muchos de ellos, como el Arqueológico o el de Artes y Costumbres Populares de Sevilla, que requieren intervenciones urgentes y que tienen hasta aprobada la rehabilitación, pero los recortes impuestos por los gobiernos nacionales del PP y PSOE han pospuesto su ejecución y puesta al día. 

El pasado mes de febrero la consejera de cultura anunciaba un plan de choque para los museos andaluces, para, según la consejera, ponga fin al “lamentable” estado que presentan un gran número de museos andaluces, especialmente los 17 centros provinciales, de titularidad estatal, pero de gestión y mantenimiento autonómica, de carácter plurianual, que contará, según indicó la consejera,  con financiación de la Junta de Andalucía, servirá, por medio de inversiones y acciones reales y efectivas, para poner en valor todos los museos, tanto desde el punto de vista de la gestión como en el ámbito estructural. Pero visto que la consejería de Hacienda no está muy dispuesta a poner los fondos necesarios para ese Plan, como ha ocurrido con el Plan de Choque de las listas de espera en sanidad, otra quimera, la consejera recurre a lo que mejor sabe hacer su partido: poner el cazo para que los ciudadanos paguen por entrar en los museos, bajo la premisa de que ese dinero irá al mantenimiento de estos. 

En cuanto a las visitas a museos andaluces, según la Estadística de Museos Públicos de Andalucía de 2018, publicada en este mes de octubre de 2019, recibieron 2.224.478 personas, siendo el Museo de Bellas Artes de Sevilla el que más visitantes recibió con 451.882 personas, seguido del Museo de la Alhambra con 272.016 personas, el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo con 214.927 personas y el Arqueológico de Córdoba con 204.086 personas. Los museos que menos visitas recibieron fueron el Museo de Huelva con 25.226 personas, el Centro Andaluz de fotografía con 26.195 personas y el Museo Arqueológico de Úbeda con 42.815 personas. Después de castigar con esta medida impositiva el bolsillo de los andaluces por ver su propia cultura en los museos, el número de visitas a los mismos va a descender exponencialmente. La consejera, en un ejercicio de catetismo impropio de un cargo público, bramaba para justificar la medida de cobrar las entradas a los museos que “en Andalucía se puede conocer la historia de la humanidad sin salir del territorio”.

 

El poco hábito de lectura en Andalucía.

La consejera Patricia del Pozo fomenta con estas medidas de pago muy poco la cultura en Andalucía, una comunidad con pocos hábitos para la lectura, por ejemplo. Así, el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros 2018, Andalucía estaba a la cola en lectores en tiempo libre, con un 56,8%, solo por debajo de Canarias y Andalucía (las regiones con más paro de España), mientras la media nacional era de 61,8 %. Madrid con un 71,4% sigue siendo la Comunidad con mayor índice de lectores, once puntos más que la media nacional (61,8%). Otras siete comunidades presentan cifras superiores a la media. Navarra (66,7%); País Vasco (63,7%); La Rioja (63,6%); Cantabria (63,3%); Cataluña (63,2%) Comunidad Valenciana (62,0%); Aragón (61,9%).

En cuanto a la compra de libros, Madrid, País Vasco y La Rioja fueron las comunidades autónomas con mayor porcentaje de compradores de libros no de texto. Cantabria y Comunidad Valenciana fueron las Comunidades con mayor media de libros comprados, 10,5 y 9,2 respectivamente. Canarias y Castilla y León siguen siendo las comunidades con menor porcentaje de compradores. Castilla-La Mancha es la comunidad donde se compraron menos libros de media 5,9 libros de media. Andalucía se quedaba en tan solo 7,1 libros comprados, lejos de la media de 8 en el conjunto nacional. 

Por otro lado, la estadística del ISBN ((International Standard Book Number), del Anuario de Estadísticas culturales del Ministerio de Cultura a fecha 2018, indica que en Andalucía en 2017 había 365 editores con actividad, y se editaron 13.748 libros procedentes de Andalucía, siendo la tercera en el ranking tras Cataluña con 651 editores y 30.787 libros editados y Madrid con 898 editores y 26.350 libros publicados. A lo que hay que añadir que las empresas culturales Se concentran en las comunidades autónomas de Andalucía, con 15.667 empresas que significan el 13,2% a nivel nacional, Cataluña, con 23.852 empresas y el 20,2% nacional, y en la Comunidad de Madrid, 25.852 empresas con el 21,8% a nivel nacional. En cuanto al empleo media anual cultural con datos del INE Andalucía se sitúa tercera a nivel nacional con poco más de 90.000 trabajadores, seguida de Cataluña con algo más de 154.000 trabajadores, y de Madrid con casi 166.000 trabajadores

En relación con el gasto liquidado en cultura el total español señalado en el Anuario de Estadísticas culturales del Ministerio de Cultura 2018, a fecha de los últimos datos de 2016, fue de 1.054 millones de euros, siendo Andalucía con 155 millones de euros la segunda comunidad autónoma, detrás de Cataluña con 266 millones de euros. En cuanto al peso del PIB del gasto cultural, se sitúa a media tabla con el 0,10 por PIB, siendo Melilla con el 0,65 la más alta y Madrid con el 0,4 la más baja, siendo la media nacional 0,09. En cuanto al valor medio por habitante por PIB la media nacional es de 22,7 euros por habitante, situándose Andalucía por debajo de la media baja con 18,5 euros por habitante, siendo Melilla con 113,9 euros por habitante la comunidad a la cabeza, y Canarias con 7,3 euros la que menos mueve por habitante en cultura.

 

El chiringuito de la consejería de cultura.

Otro de los lastres que tiene la Consejería de Cultura es la administración paralela que cuelga de ella, el chiringuito de la Agencia Andaluza de instituciones Culturales. El pasado julio la Consejera  Patricia del Pozo aseguraba en el Parlamento de Andalucía que Del Pozo dice que “no consentirá” que en la Agencia de Instituciones Culturales haya personas que “cobren sin trabajar” “no tiene ninguna intención de despedir a nadie” en la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, pero ha asegurado que “no tiene por qué consentir” que “haya personas que han accedido a un empleo público de forma indebida o cobran sin realizar un trabajo que justifique su sueldo”.

También señaló a la auditoría interna de la Junta, de la que se desprende que la agencia «es solo a medias un medio idóneo para llevar a cabo sus funciones; que hay otras que no debería hacer; que hay duplicidades en algunos de sus servicios; que la consejería podría asumir algunas de sus funciones; la falta de una dirección estratégica; la inexistencia de objetivos a largo plazo, así como la dificultad para evaluar resultados y deficiencias en su planificación«. Además, esta Agencia cuenta con 483 trabajadores que reciben 18 millones de euros en nóminas; otros cinco millones de euros se destinan a gastos generales de funcionamiento, mientras que un millón de euros es el dinero que se destinaba a promoción cultural. Patricia del Pozo debería acometer en profundidad una reforma total de esta Agencia o su liquidación, tomando las decisiones que mejor le convengan a la Junta de Andalucía, antes que subir los precios de los museos en Andalucía. Pero mucho nos tememos que se termine integrando finalmente a este personal en la Junta de Andalucía y lo precios de entrada a los museos en Andalucía se terminen disparando con este gobierno. Tiempo al tiempo.