The news is by your side.

¿Quién es el nuevo alcalde de Almería?

Este es el perfil que que ha trazado el periodista Javier Salvador en Teleprensa sobre el nuevo y joven alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco Monterreal

El nuevo alcalde de Almería, Ramón Fernández Pacheco Monterreal, que apoyará la facción de Ciudadanos comandada por el controvertido Miguel Cazorla con su silencio, abstención o voto en blanco, ocupará el sillón de primer edil de la misma manera que Susana Díaz –salvando las distancias– tomó la presidencia del Gobierno de la Junta cuando Griñán dijo que se apartaba de la política, ya fuese por la presión de los ERE o porque sencillamente había perdido las elecciones. Aquello de irse y dejar en su lugar a alguien que no había ganado las elecciones en la calle fue calificado por el PP casi como terrorismo político, y mira por dónde, una vez más ahora les toca tragar una buena cucharada del amargo jarabe que siempre recetan a los demás. Más o menos es lo que le ha pasado al también concejal por Almería, pero vicepresidente de la Diputación por ahora, Javier Aureliano García, cuando la oposición le ha llegado con los recortes de prensa de los escándalos que le llueven a la institución, y se quejaba de que “malamente” está la política si se sirve de lo que dicen los medios de comunicación para poner en duda la gestión de la institución. Y claro, habrá que recordarle las fotos de su PP de Almería, con él a la cabeza, llevando a la fiscalía recortes de prensa ante la alarma social que éstos creaban como única prueba. Pero entonces ellos estaban en la oposición y gobernaba el PSOE y, antes de eso, el PAL. De Aureliano nos ocuparemos la próxima semana, de la Gürtel y de sus negocios en Almería que, ahora sí, les toca salir a la luz.

En el plano profesional tampoco mejora mucho la historia porque el único desempeño profesional conocido del nuevo alcalde fue en la empresa de Juan Antonio Galán, uno de los empresarios detenidos en la Operación Poniente.
 

El protagonista del momento es Ramón Fernández Pacheco Monterreal, treinta y muy pocos, licenciado en Derecho por la Universidad de Almería y bisnieto del alcalde de la capital en la Transición, Rafel Monterreal Alemán. Es hijo de un militar que falleció cuando apenas tenía siete años. De este capítulo hasta ahí.

Hasta hace bien poco su padrastro o marido de su madre, como lo quieran llamar, es el abogado del Estado Demetrio Carmona y, claro, esto es como todo, mientras la gente sirve pues ahí generamos un héroe pero cuando de la naranja queda la cáscara lo convertimos en villano. Pasa en todas las casas y oficios. Carmona, que ha sido uno de los valedores de este chaval, desaparece de la escena pública al ser el más mediático de los tres implicados en la Operación Tres Reyes, esa rocambolesca historia de billetes de la antigua Irak que terminaron en Almería con dos imputados en prisión y un abogado jefe del Estado de Almería destituido, zarandeado profesionalmente, apaleado socialmente y vilipendiado precisamente por el que creía su entorno político más cercano. Hasta ahí los antecedentes personales.

En el plano profesional tampoco mejora mucho la historia porque el único desempeño profesional conocido del nuevo alcalde fue en la empresa de Juan Antonio Galán, uno de los empresarios detenidos en la Operación Poniente. En concreto la firma se dedicaba a realizar trabajos para el área de urbanismo que controlaba de arriba abajo el interventor accidental del municipio, José Alemán Bracho, el epicentro del gran caso de presunta corrupción por ahora conocida en Almería. Y aquí se pone caliente el asunto y no por el hecho de que Alemán y Monterreal compartan como antepasado al alcalde de la transición.

El tiempo durante el que trabajó, ya fuese de técnico, becario o aprendiz, fue precisamente la cresta de la ola de los hechos que se investigan en la Operación Poniente, el timeline que dirían los modernos, pero el dato no está ahí porque ese es un hecho casi accidental.

El verdadero puntapié a la inteligencia de los almerienses es que Galán no hacía nada que no aprobase Pepe Alemán que, a su vez, era el socio e íntimo amigo de Luis Rogelio Rodríguez Comendador, ex alcalde de Almería y quien cede al cachorro el bastón de mando. La relación empresarial entre Alemán y Comendador quedó sobradamente acreditada por el histórico Juan Antonio Segura Vizcaíno, verdadero azote del grupo de las líneas del PSOE.

Ahora bien, a partir del sábado Pacheco Monterreal tiene en su mano la decisión de cambiar, abrir puertas y airear rincones oscuros o seguir el dictado de quien, se mire por donde se mire, no es ni mucho menos uno de los mejores políticos que ha dado esta provincia, todo lo contrario. Comendador será recordado como de flojo a muy flojo, algo así como un trucha de la política.