Recuento de botox

 

_María del Carmen, ¿cómo te ha ido de presidenta de la mesa electoral?

_Me lo he pasado en grande, María Auxiliadora. Sobre todo en el recuento de botox.

_¿Pero eso también entra en los 65 euros que te dan después?

_No, eso lo hago yo como “frilansss”.

_Vamos, autónoma de toda la vida.

_Eso, hasta que empezamos a nombrar las cosas en inglés para darnos pisto…

_¿Y cómo ha quedado la cosa?

_Que vamos mejorando exponencialmente, que dicen ahora.

_¿Y eso?

_De las últimas elecciones municipales, que me tocó de vocal, a este domingo, no te puedes figurar cómo se ha incrementado el número de botox.

_La gente tiene más conciencia, niña.

_No, María Auxiliadora, que somos un país de viejos y que no queda otra que rejuvenecer.

_¡Menudo peliculón!

_¿Tú te acuerdas de aquella que vino de Madrid y se fue a vivir al ático de María del Sagrario?

_Que era muy mona, ¿no?

_Mona, mona, no. Que se sabía sacar partido.

_Vamos a dejarlo ahí.

_Pues esa, hasta arriba de botox.

_¿Sí? Pues está antipatiquísima.

_Antipatiquísima, no. Lo que está es pétrea.

_María del Carmen, el culturón que tienes tú…

_Niña, yo soy bachillera. No te confundas.

_Hija, igualita que cualquier político de ahora. Basta con que diga habemos e incluso haiga para que lo hagan delegado de Educación de la Junta de Andalucía…

_Pero eso era de la otra Junta.

_La de ahora tampoco te creas tú que ha variao mucho.

_¿Ya estamos con la presión?

_Mujer, ¿no se vota para el cambio?

_Sí, pero mientras llegaba el cambio, todos callados como samaritanas del amor.

_¡Mira que eres de Perales!

_A la raíz del árbol, niña. Si te cuento que la de los apellidos largos y el bolsillo corto se ha puesto botox hasta en las manos…

_¡Qué barbaridad!

_No se podía ni mover. La tuvieron que ayudar entre unos cuantos a meter los sobres en las urnas…

_Niña, va a llegar un momento en que nadie va a poder ir a votar.

_No te digo yo que esto del recuento de botox es sociología pura.

_Y dura.

_Para quedarse de piedra, chiquilla.