Que nuestros gestos o expresiones nos delaten y contradigan nuestras afirmaciones es una evidencia clarísima. Ante la presencia de alguien nuestro semblante se vuelve taciturno, agrio o feliz y alegre. Se crea una sonrisa o rigidez porque el subconsciente se muestra. Sale a la luz reflejando ese interior de simpatía o antipatía hacia el de enfrente o el de al lado. Independientemente del protocolo, del saber estar que por educación le corresponde a un monarca el ser humano existe y en cualquier instante puede asomarse. Felipe VI no está cómodo. De las anteriores elecciones a las actuales el cambio es abismal. Por supuesto preocupa el singobierno y una pandilla de seres llamados diputados que están cobrando por no hacer nada y que cada vez colocan más puntos de desunión que de unión sin importarle lo más mínimo los españoles y la Nación que los representa.
Es notoria la simpatía de Felipe VI por Pedro Sánchez. A Rajoy lo ve miedoso, pusilánime, influenciado o manejado por su propio grupo
Un sillón, un Ministerio para sentarse a descansar. Es notoria la simpatía de Felipe VI por Pedro Sánchez. A Rajoy lo ve miedoso, pusilánime, influenciado o manejado por su propio grupo y créanme esas no son aptitudes para gobernar y realizar un proyecto de gobierno. Donde dije digo ahora digo Diego. Pasó con la ley del aborto y ahora con el tema Cataluña. No es mala gente pero así no se aprueba una oposición sin presentarse, sin someterse a un reto. Los independentistas catalanes, las Mareas , Podemos no quieren la Monarquía ni guardan las mínimas normas de protocolo ante un Rey. Su vestimenta es la misma que si estuvieran en la taberna pero a los Goya sí los respetan y van de pajarita. Esta actitud es típica del acomplejado, del que quiere hacerse notar y que si va como el resto sería un insignificante. El proyecto Podemos un fiasco, una falacia, una mentira , un discurso de charlatanes de feria e inexpertos en la tarea de gobernar. Rivera quiere hacer , tiene ideas pero son necesarios apoyos , necesarios e imprescindibles. Me gusta de Albert su ataque a la corrupción pero de ahí a que se realice hay un tramo muy largo y muchos caminos. Al Rey se le va la vida en conseguir la armonía de grupos dentro de los cauces establecidos por la Constitución pero ello implica la unidad de España y la continuidad de la Monarquía. Y ello va unido a según que gobierno y a la insensatez y egocentrismo de sus líderes porque una mala decisión conduce a lágrimas y lamentos posteriores . Como suele decirse en Galicia la palabra sentidiño es aplicable al contexto político. En contra del egoísmo y la cerrazón y en pro del bien común de los españoles que contemplan atónitos la escena del singobierno.