Hay que ser cínicos
Hoy los herederos ideológicos de aquellos viles asesinatos, han vuelto a la casa de Blas Infante para intentar lavar la historia y reconvertirla a su interés.
El 2 de agosto del año 1936, una serie de asesinos (“ hombres vestidos de falangistas, al mando del sargento Crespo”) se plantaron en la casa de Blas Infante y se lo llevaron, para ser fusilado vilmente 8 días después, por el gravísimo delito de defender a Andalucía, en el kilómetro 4 de la carretera de Sevilla a Carmona, también conocido hoy día como Gota de leche.
Fue fusilado junto con otros luchadores por la libertad; y hoy en julio de 2025 los herederos ideológicos de aquellos viles asesinatos, han vuelto a la casa de Blas Infante para intentar lavar la historia y reconvertirla a su interés.
Que a mí me conste, no han condenado en ningún momento las fechorías del franquismo, ni los asesinatos, no en el fragor de una batalla, de una guerra, sino fríamente, contra un paredón, como murieron cientos de miles de ciudadanos, que pensaban de forma distinta, tanto durante el periodo de una guerra fruto de la sublevación de unos facinerosos, como durante las cuatro décadas posteriores, donde se siguió encarcelando, torturando y fusilando a quienes pensaban de otra manera.
Me parece de un cinismo fuera de toda duda, de una actuación sin complejos como diría Aznar, el chuleo macabro que se trae el gobierno del Partido Popular; y menos mal que no le han preguntado a sus queridos colegas de Vox.
Si quieren reconciliarse con el pasado, hagan dos cosas: condenen sin paliativos el levantamiento franquista, fascista, del 18 de julio del 36 junto con todas las consecuencias que ello contrajo, y recuperen activamente la memoria histórica, porque todavía hay muchos ciudadanos ( entre ellos los familiares del Padre de la Patria andaluza: se cree que sus restos se encuentran entre los más de 1.100 cuerpos de la fosa común de Pico Reja, la más grande de España, en el cementerio de San Fernando de Sevilla) que necesitan encontrar los retos de sus antecesores también vilmente asesinados.
Mientras tanto, no pretendan que el pueblo andaluz les crea. De alguna manera forman parte de la misma historia. Lamento que no esté Fraga (al que ustedes siempre han considerado como un presidente de honor de este Partido Popular…) para preguntarle.. El cinismo les chorrea por todas partes.