Y se cayó la careta

A Moreno Bonilla ya se le ha caído la careta, esa careta con la que aparecía, con su imagen de bonachón, de hombre tranquilo…; incluso su discurso de parecer estar preocupado por todos nosotros, se le ha venido abajo.

Ya se ha visto realmente como es. Lo que muchos ya conocíamos y veníamos denunciando, de una persona que está dedicando todo su esfuerzo a beneficiar a los grandes capitales, a los empresarios con mayor poder, en perjuicio de las clases más desfavorecidos y de clase media, que necesita de los servicios públicos; en definitiva, en perjuicio de todos los andaluces que necesitan de los servicios públicos, llámese sanidad, llámese educación, llámese servicios sociales…De estos, que somos la inmensa mayoría de los andaluces, no le importa nada su presente, y menos su futuro.

Su política sin freno de beneficio lucrativo a costa de nuestra salud, ha quedado crudamente de manifiesto con un caso tan escandaloso como el de la detección precoz de los cánceres de mama de las mujeres andaluzas. Ya no tiene a quien mentir ya no sabe cómo engañar para defenderse, cuando se le ha cogido en algo que además de ser muy triste, no es más que un caso de los muchos que están ocurriendo todos los días a los andaluces, de una forma más soterrada e individualizada. Por que ¿a cuántos de nosotros se nos ha dilatado una cita médica que podría frenar a tiempo un proceso mucho más grave y de más difícil curación?; ¿a cuántos se nos ha postergado una operación quirúrgica o un tratamiento adecuado en el momento en que lo necesitamos y no meses o años después, cuando ya a veces el problema no tiene solución?. ¿Cuántas muertes se podrían haber evitado?.

Una vez más, han sido las mujeres andaluzas, las que han sufrido y están sufriendo este riesgo de cáncer de mama, las que han tenido que levantar la losa que nos tiene debajo a todos los andaluces, porque todos tenemos el riesgo de que en algún momento si no nos ha ocurrido nos ocurra un caso clínico que requiere intervención en su justo momento y no cuando le parezca bien a los intereses de Moreno Bonilla.

Y cuando se ha visto acorralado, con las evidencias de miles y miles de mujeres preocupadísimas, igual que el resto de su familia, con mujeres que ya han fallecido por culpa de estas políticas, como una persona, cobarde e insensible no se le ocurre más que intentar mentir, echándole la culpa a los anteriores gobiernos. Afortunadamente hay documentación más que sobrada para demostrar que eso es radicalmente falso. No hay más que ver los documentos elaborados por los últimos gobiernos socialistas, que pusieron la sanidad en un nivel que ojalá se mantuviera hoy día .

Pero en todo caso si hubiera que mejorar algo, que siempre es posible ir avanzando conforme hay nuevas técnicas o nuevos conocimientos, tiempo de sobra ha tenido Moreno Bonilla para hacerlo. Hay que ser muy cobarde para estar todavía defendiendo sus políticas inhumanas con mentiras que no se sostienen.

Y también, cuando ya se ha visto acorralado entre la espada y la pared, el muy cobarde también señala como única responsable a una mujer, que desde luego no es un ejemplo de gestión ni mucho menos, pero ¿no se le ha ocurrido hacer una autocrítica personal?. ¿Acaso no sabía él, cuando tomó la decisión de ir desmantelando, poquito a poco para que no se note, la sanidad pública, que estos riesgos iban a convertirse en realidades antes o después?. ¡Claro que lo sabía! porque ya en el año 2012, siendo responsable de la política de dependencia con Mariano Rajoy nos recortó a muchos andaluces mayores el derecho a ser atendidos cuando lo requerían sus débiles condiciones físicas. Y no tuvo corazón para evitarlo. Nosotros, en Andalucía nuestros mayores especialmente, lo sufrieron; ¿cuántos miles de andaluces fallecieron sin haber tenido ninguna atención domiciliaria gracias a la insensibilidad sin escrúpulos de Moreno Bonilla?. Por tanto, nada de sorpresas, lo único nuevo es que se le ha caído la careta.

Y me pregunto ¿hay alguna mujer andaluza que pueda seguir confiando su salud a este Moreno Bonilla?;  es más ¿hay un solo andaluz que quiera confiar su salud o la de sus seres queridos, sus familiares o amigos, a una persona como Moreno Bonilla?.

Como decían en mi pueblo, quién no te conozca que te compre.