Una mezcla de miedo, morbo y cabreo es lo que he podido detectar a lo largo de la mañana en un rápido sondeo por algunas terminales socialistas de Andalucía. Todo ello ante la cita de este fin de semana donde el PSOE se enfrenta como organización a una de sus más graves crisis internas desde la renovación de Suresnes en 1974, incluida la que provocó Gonzalez al dimitir por el marxismo. De este lance, el actual Secretario General, puede salir crucificado por sus pecados o montado en una borrica tambaleante.
Miedo porque nadie sabe que puede pasar este sábado en la reunión de la Federal, en un cacareado choque de trenes donde por lo menos un maquinista la va a palmar, fijo; pero sobre todo temor, más del que nos imaginamos, a lo que empiece a suceder día después de lo que tenga que pasar este fin de semana. La política da de comer a mucha gente en este país.
Morbo porque no conviene olvidar que la federación andaluza no es al cien por cien susanista, aunque lo parezca. Algún secretario provincial se ha posicionado ya con las tesis oficialistas del pedrismo.
Ha cuajado bastante la idea fuerza lanzada por Ferraz entre la militancia de que estamos en ésta diabólica disyuntiva para el socialismo: quitar a Pedro Sánchez, para poner de presidente a Mariano Rajoy.
Y cabreo porque la inmensa mayoría de militantes consideran que quienes han provocado en gran medida el problema no son la mejor solución, se mire por donde se mire. Y, sobre todo, que se está poniendo en riesgo el fortín andaluz sin el liderazgo directo de Susana, “desnudando un santo para vestir a un beato” en palabras de un socialista, evidentemente ateo.
Por otro lado ha cuajado bastante la idea fuerza lanzada por Ferraz entre la militancia de que estamos en ésta diabólica disyuntiva para el socialismo: quitar a Pedro Sánchez, para poner de presidente a Mariano Rajoy.
De la misma forma que en la memoria colectiva no se olvida que el maldito Sánchez que nos va a llevar a la ruina, fue una elección de quienes hoy quieren descabalgarle a sangre y fuego, liderados por la potente agrupación andaluza y por Susana Díaz. (Por cierto, aquí algunos por equivocarse gobernando, están hoy a metros de un banquillo)
En estos días de vísperas de la gran batalla las espadas, las lanzas y las navajas albaceteñas (y extremeñas) se afilan en las cuchillerías del sur y todos los esfuerzos de Susana Díaz se concentran en tejer una red, suficientemente fuerte y pegajosa, que no permita a Sánchez respirar y salga colgado del madero el sábado.
La intervención de González por teléfono desde América en la SER, ha sido demoledora para el SG y sus pretensiones.
Y mientras en los sótanos del partido se diseña la estrategia del día ‘D’, por las alturas vuelve a aparecer “dios”, Felipe González ,contándonos que Sánchez no es de fiar y que le engañó. Y lo demuestra desvelando el contenido de una conversación privada con el SG de su partido que, posteriormente, dice que le sirvió para ilustrar un articulo en El País. Pese a este detalle de mal gusto, indigno de un expresidente de España, la intervención de González por teléfono desde América en la SER, ha sido demoledora para el SG y sus pretensiones. Felipe ha dicho, sin careta, todo lo que piensan los llamados rebeldes pero en lenguaje claro, conciso y, lo más notable, se lo ha dicho a toda España.
Claro que Sánchez no se ha quedado callado y ha devuelto el zasca diciendo que él no comenta las conversaciones privadas que tiene con mucha gente del partido y que se ha limitado a hacer lo que ha mandado el Comité Federal.
Según diversas fuentes socialistas la tela de araña que se le está preparando a Sánchez para este sábado fue patentada hace tiempo en Andalucía y en todas las ocasiones su uso sirvió para liquidar a la pieza elegida.
La jugada es bien simple, consiste en lograr la dimisión de la mitad más uno de la dirección, dejando fuera de juego al SG de turno y dando pie a una gestora que, muy posiblemente en este caso federal presidiría Susana Díaz y sin despeinarse. Situación que le permitiría controlar a corto y medio plazo la distribución del poder en el seno del PSOE, pero sobre todo situarse para el futuro. Sus ambiciones políticas están intactas, aseguran en su entorno. Si eso sucede, parece evidente que el reparto del botín de guerra será entre las capitanías generales rebeldes, menos de la mitad de los gobiernos autonómicos en manos del PSOE.
Curiosa metamorfosis la de la señora Díaz que hasta antier mismo se hartó de proclamar aquello de mi sitio está donde me han puesto los andaluces.
Ella, Susana, ya ha dicho en Puerto Real que estará donde digan los militantes, “en la cabeza o en la cola”. Curiosa metamorfosis la de la señora Díaz que hasta antier mismo se hartó de proclamar aquello de mi sitio está donde me han puesto los andaluces. Claro que también ha dicho que los andaluces y sus problemas son el centro absoluto de su atención y trabajo político, cuando desde la oposición le han acusado de dejación de funciones por estar dedicada a conspirar todo el tiempo contra Sánchez.
Como les contaba, esta fórmula de dividir por la mitad una ejecutiva siempre le ha funcionado bien a Susana en Andalucía y desde hace mucho tiempo. Así logró desbancar a Bibiana Aido de las JJSS o, años después, cargarse al SG de Almería, Diego Asensio o a su viejo amigo y padrino José Antonio Viera en Sevilla.
En estos casos la presión directa se ejerce sobre miembros indecisos de las ejecutivas, un método infalible para lograr el objetivo final. Los elegidos suelen ser quienes piensan más con la cabeza que con el estómago, aunque quede feo. Pero hay que seguir comiendo todos los días y muchos sueldos dependen de una decisión política. Suelen ser los elementos más bizcochables.
Intentando como sea que Sánchez salga el domingo como crucificado, no montado en la borriquita y con la palma en la mano.
La pregunta es si, en la actualidad, eso es posible en la ejecutiva federal donde el PSOE-A, Susana Díaz, tiene sentados a ocho miembros de su confianza, incluida la presidenta Micaela Navarro. La primera mujer que se sienta en el sillón de don Ramón Rubial, Manolo Chaves, Pepe Griñán y tantos otros, que se está viendo obligada a pegar tiros a cara descubierta desde el lado de los rebeldes. Pues en eso andan en estas horas de vísperas las cabezas pensantes que deciden su actuación en la tragedia socialista de este sabado, intentando como sea que Sánchez salga el domingo como crucificado, no montado en la borriquita y con la palma en la mano. Que puestas como están las cosas, vaya Ud a saber.