El desguace español
De las tres puntas del escudo defensivo, Jefatura del Estado, Poder Judicial y FAS, las dos primeras están siendo objeto de un brutal y desleal hostigamiento.
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FAS
Sánchez o el elogio de la excrecencia
El voto a Sánchez no fue democrático. La investidura, el 7-E, fue la mera consumación aritmética de una estafa electoral.
Pedrea militar
La pedrada al general Alejandre. Su relevo estaba cantado por su constante, clara y valiente denuncia del bajo nivel de operatividad de las FAS.
De militares y políticas
Unos y otros harían el mejor servicio al ciudadano dejando de enredar y decir sandeces sobre las FAS, dedicándose a buscar el voto limpiamente.
Erradicar el franquismo de las Fuerzas Armadas
Algunos de los militares firmantes del manifiesto en alabanza a Franco, se han retractado a día de hoy, en la adhesión al manifiesto franquista.
Defensa hiperbólica de la defensa
Lo más lamentable es tener que reconocer que el problema de nuestros políticos con respecto a la defensa nacional es que no saben para qué quieren las FAS.
Taburete Nacional
El Estado se podría así valorar como una suerte de taburete sostenido por tres firmes patas: la jefatura del estado, la judicatura y las Fuerzas Armadas (FAS).
¿Fuerzas Armadas o club de uniformados?
Por lo que se ha visto, la protesta callejera, tan de moda hoy y que parece servir tanto para un roto como para un descosido, tiene poco éxito en el mundo militar.
Mejoras al personal militar: voluntad y dinero
Pedro Pitarch.- Para alcanzar ese horizonte ministerial se necesitan solamente dos elementos: voluntad política y dinero. Y ahora parece haber de los dos.
Tensión
El empleo de las FAS en defensa del orden constitucional, bajo la dirección del Gobierno, es un cometido legal y legítimo (arts 8 y 97). Foto, Efe.