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De humo parroquial, de rosas rojas, de minas en el aire

El señor Ortega Smith se dedicó a mentir por la cara sobre un hecho documentado con firmas y sellos de tribunales militares de la posguerra.

 

Los llamados partidos constitucionalistas y los de extrema derecha parlamentaria gritan a pleno pulmón contra el señor Torra, presidente de la Generalitat catalana, por invitar y alentar la desobediencia civil. Y quita los lazos amarillos, juez por medio.

La señora Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, cita el supuesto de que se vuelvan a incendiar como en 1936, según ella, las parroquias de los barrios populares de Madrid. Esta señora cuyo ascendiente directo no devolvió un aval a una entidad que los concedía de fondos públicos, y que ella tampoco ha intentado devolverlos , que eso. Sí que es quemar echando humo. Un aval de 400.000 euros más intereses. Y esta señora con cara de porcelana china, se permite dar lecciones de historia patria omitiendo la mitad de ella por lo menos. En un parlamento autonómico. Y los partidos constitucionalistas y de extrema derecha encantados de que la investigada en una comisión de la propia asamblea se dedique a echar gasolina y yesca cuyo humo impida o dificulte llegar a la verdad que puede costarle el cargo. Las iglesias ardiendo dan mucho de sí para impedir ver. Luego el señor Casado habla de la señora Maestre y de su capilla universitaria donde dio hace años el do de pecho.El do de pecho de la señora Maestre se oía, y se veía, mejor porque no había humo de las iglesias de la señora Díaz Ayuso.

El señor Ortega Smith, patriota si los hay con apellido segundo oriundo de la Alcarria o de Aguilar de Campoo, se dedicó a mentir por la cara sobre un hecho documentado con firmas y sellos de tribunales militares de la posguerra. No hace falta mentir por mucho que se grite para saber que las brutalidades de los españoles durante la contienda civil provocada por el golpe de Estado de un militar que había jurado lealtad a la República, deben entristecernos hoy como entonces. Los populismos y los programas de la extrema derecha, soberanista o nacionalista, opina Jean-Yves Camus, investigador de ciencias políticas en el “Instituto de Relaciones internacionales y estrategias”. (IRIS) lo son de la  llamada “democratie illiberale”.  Y explica que los dirigentes de los países son elegidos conforme a las normas de cada país con sistemas de las democracias representativas. Pero inmediatamente esos partidos trata de embridar los contrapoderes sociales, imponen el Estado fuerte sobre el Estado de derecho, la sociedad civil es puesta al paso con marcha funebre, la ideología nacionalista e integrista cristiana es exaltada, la normativa europea es degrada como antinacional. Estos son los regímenes de Orban en Hungría y Kaczynski en Polonia y lo que persiguen Le Pen en Francia, Salvini en Italia, Abascal en España. No nos equivoquemos. Don Francisco está muerto. No es el enemigo. Estos viven y quieren aherrojar a los españoles con sus horcas.

Una de las secciones de la Audiencia de Sevilla ha ordenado reabrir un procedimiento archivado por dos veces por la juez natural que ha dirigido la instrucción. El auto de la sección séptima se publica en plena temporada electoral en perjuicio del PSOE  al ordenar que sea investigado tras los dos autos anteriores de archivo a uno de sus cargos públicos. Entre los magistrados que forman la actual sección figura la señora Alaya cuyas intervenciones en sucesivos incidentes procesales adoptadas en periodos electorales constituyen un ejemplo de la aplicación del principio de incertidumbre  de Heisenberg . Por supuesto los jueces y sus tiempos siempre han dicho que no son los tiempos políticos ni electorales. Ningún español bien nacido lo cree, claro. Pero se sigue afirmando. Tontos hay a manojito.

Ya dijo Einstein que “las coincidencias son la manera que tiene el Eterno de permanecer en el anonimato”.