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Horcas caudinas

Este artículo peina canas, como yo. No se publicó ni en el Correo, ni en El País ni en el Diario.es...

Hoy presenta su libro Pepe Griñán.
Este artículo peina canas, como yo. No se publicó ni en el Correo, ni en El País ni en  eldiario.es

 

El fuego amigo funcionó como nunca…como siempre, cuando llega el naufragio ya sabemos qué hacen las ratas. Que se lo prgunten ahora a Casado y dentro de poco a la incómoda Diaz Ayuso, en cuanto el empapelamiento esté cerrado con un lacito y el papel de celofán en que la envuelvan, tenga tintes sanguinolentos. Le quedará su enamorado de  Es.radio, si acaso.

 

Aunque en siete años han pasado muchas cosas, la venganza política sigue en marcha y el PP no se ha retirado del caso. Erre que erre, aunque ya se lleven los Ertes más que otra cosa.

 

No se que pasará con el Buen Pepe Griñán. Parece que no se espera nada bueno. Por si acaso, antes que saliera el libro ya lo habían vuelto a martillear, por si acaso se había soltado un clavo. La muerte en vida para alguien al que solo se puede acusar de soberbia intelectual como a Fray Guillermo de Barsquelville de Umberto Eco y Jean Jacques Annaud.

 

En otro momento publique en el Correo de Andalucía un art referido a sus intervenciones en el Comité Director, tan distintas a las recurrentes y livianas del resto de dirigentes. Sus análisis eran profundos y certeros. Lo titulé El Cuñado de Gamazo.

 

Sólo recuerdo las intervenciones de Rafael Román de Cádiz en este modo de hacer política. Y cuando quería, las de Manolo Pezzi, de Granada de entre mis mayores. De la gente más joven, las de Mario Jiménez  y las últimas etapas de Susana Díaz.

 

El nuevo partido en Andalucía anda en sus menesteres electorales y todo esto le resulta añejo cuando no molesto, como el Sáhara. Llegan con prisa y en el corre corre que dicen los antillanos. No existe siquiera el amor, en los benditos tiempos del cólera.

 

Este es el texto íntegro de aquel artículo que hoy ve la luz:

 

 

Todo se aceleró entre Semana de Pasión y Semana de Feria, la política del presente empezó a andar con el corazón en un vilo por la política pasada. Como botín de guerra, los emergentes ponían como tope la entrega de las cabezas de los Bautistas. Será por lograr un golpe de efecto que siempre procuran los fariseos. A sabiendas que no tienen responsabilidades en el Gran Fraude, en cuanto que no se llevaron un solo euro y que la responsabilidad política la pagaron saliendo de la escena política andaluza hace rato, cuando ambos pudieron continuar gobernando con el apoyo electoral y parlamentario respectivamente. Pero da igual, carnaza política a las fieras. Después por el camino de vuelta, entre salves rocieras y el Corpus, empezaron a sonar campanas funerales.

Bienaventurados los que sufren persecución a causa de la justicia porque de ellos será el reino de los cielos. Mateo 5:3-12.  ¿Poco consuelo? El tiempo lo dirá. Lo cierto es que  al final tus obras, te acompañan.

Se van dos hombres buenos, en el sentido machadiano del término, arrastrados, expuestos a juicio público, del que han salido condenados antes de empezar, saldrán heridos en su prestigio, aunque no se encuentre en ellos motivo alguno de delito.

Tantos años de ejercicio del poder, tantas elecciones ganadas, tanta importancia de ambos personajes- primero ministros del gobierno de la nación y luego Ptes del territorio más extenso y poblado del Estado y de manera ininterrumpida- juegan en su contra y juega a favor de su condena anticipada, la escenografía de corrupción nacional, en la que se mezclan sin distingos, a brocha gorda y ante el tormentoso ruido jaleado por el vociferío de las tertulias, justos y pecadores. Portadas combinando sus caras con Bárcenas, demuestran el tamaño del latrocinio.

El linchamiento-vía escarnio- del socialismo terrenal, allí donde echó raíces, ha de quedar evidente y a la intemperie, al igual que las creencias cristianas son puestas en entredicho ante cualquier affaire de curas o algún obispo. Total, al Papa se le acusa de no andar rápido, de no vigilar sus parroquias. Las otras creencias disfrutan con locura con esos casos, y aprovechan todos los medios para lograr el final del dominio de la creencia mayoritaria.

Al final de esta estas estaciones de penitencia, este largo paseo entre ascuas y escupitajos, quedarán hecho guiñapos en su prestigio dos presidentes honrados, hace nada receptores de letanías laudatorias de una comparsa que les buscó la ruina y otra, entreverada con la anterior ,que ya no quiera saber nada de ellos. Periodismo amigo, incluido.

Se dirá que así están los tiempos y que no hay nada que hacer cuando los nubarrones cierran cualquier visión distinta. Magdalena Álvarez pasó por ese suplicio.Ni se desenmascara a los que de verdad estuvieron en esa masa, ni se defiende a los generales injustamente señalados y tan pronto amortizados.

En todo caso, el tiempo pondrá a cada uno en su sitio, como acaba de pasar con Mar Moreno. Mientras, aunque suene a responso,se hace necesario denunciar este linchamiento envuelto en bandera anticorrupción de cartón piedra. Se hace preciso decir bien alto que se está haciendo pasar este suplicio a dos hombres decentes que no se han lucrado ni con los ERES ni con los Cursos de Formación. Dos Ptes del socialismo español, entregados a la murga, al escándalo en el que siempre será preferido Barrabás, y a la justicia de Pilatos, complaciente al ruido y sin ganas de indisponerse con el tumulto de los linchadores.

Acobardados en un rincón, antiguos discípulos los niegan tres(mil)veces, ante el cacareo del corral. O peor, mantienen un silencio atronador. No todos, menos mal.

Lo que caracteriza al tiempo que vivimos es la velocidad con que ocurren las cosas. Quizá la dignidad política y personal, les ha hecho mantenerse en sus puestos, de pie, con lo fácil que hubiera sido alejarse de este ruido y ahorrarse la humillación política de la exigencias farisaicas de los parabolanos. Pero escogieron el más difícil, el del Supremo y la siempre complicada explicación del término aforado, tanto más complicado que el de imputado.

En fin, dos por el precio de uno. Son distintos pero unidos por el destino de sus carreras ministeriales y presindenciales y a los dos les une FG (Felipe González). Aunque uno sea ,más carne de su carne, él los defiende en público a los dos. Cuestión de jefatura bien entendida.

Uno se fue antes. El otro, hecho de otro pellejo, aún aguantó. Al final no se explicará nunca, quién se ha llevado su queso. O quizá, ya si.

En un Comité Director, cuando todo esto empezó, hace ya años, ya les anticipé en mi intervención, que ese podía ser el objetivo. Llevarse a los dos por delante.

Entonces sonó a chino. Qué lejos, y qué cerca, queda aquella premonición: Para que una intriga salga adelante,  siempre , siempre ,hacen falta los colaboradores internos necesarios.

En cuanto al otro objetivo buscado, la caída del Socialismo del Sur, como se comprobó en marzo, y se ha confirmado en mayo, no lo han conseguido. Una hija de ellos, se ha encargado de aguarles la fiesta a unos y también a otros. Y no lo llevan bien. En el proceloso proceso de investidura que hemos vivido, más allá de la posición de la oposición, hay que ver -ahora que está de moda- el retorcido lenguaje gestual, propio de amantes despechados, que hemos tenido que ver.

No he tomado ni una cerveza con ellos. Y con uno, mantuve un congreso sevillano a cara de perro en el 2005 que, por supuesto, perdimos ante sus entonces fieles, los que o lo llevaron a esta situación y/o ahora lo abandonan. Música y letra que he oído en primera fila, ya varias  veces, tantas como líderes sevillanos caídos.

En definitiva, no creo que sea mucho pedir, algo tan sencillo como el respeto para ambos.

Cuando pase este maldito embrollo, espero  que alguien de bien se le ocurra  un sencillo, pero claro, acto de reconocimiento y apoyo. Y no lo dejemos ad calendas grecas.

 Y -si no es mucho desarreglo-que sea invitado el compañero Demetrio Madrid. Otro socialista de bien al que se hizo pasar por las Horcas Caudinas, para que un personaje como Aznar llegara al poder en Castilla-León.

 Dos hombres y un destino, obligados a pasar por ese arco, en días de Autos de Fe.

Manuel Copete Núñez
Miembro del Comité Director del PSOE  de Andalucía.