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Los puntos cardinales

Las religiones, todas, son un producto humano, hecho por manos de personas humanas.

Recordaba Woody Allen en una entrevista publicada en El País del 22/12/2017 refiriéndose a él mismo : “Mis defectos no son trágicos. Como mucho son patéticos”.
En Sevilla la modernidad derivada de la Ilustración solo existe en el número de turistas que llegan a San Pablo y se dispersan por la ciudad siguiendo la doctrina militar del SWARMING que, en síntesis, consiste en acciones de enjambre, esto es despliegue de pequeños grupos de personas conectadas entre sí y con el avión, pero en el resto de la antigua cristiandad se ha achicado tanto el espacio católico confeso e influyente que en muchos lugares de ella corre el riesgo de desaparecer como organismo vivo y con futuro. De esto ya habló y bien, Benedicto XVI.

 

Separada del poder civil y militar, obligada a respetar las democracias y sus perversas libertades, coaccionada velis nolis a no quemar disidentes ni siquiera en el infierno del Dante, la organización jerarquizada de la clerecía católica ve desenmascaradas muchas de las tropelías de algunos, bastantes, de sus integrantes en unas riadas que arrastra también a altos, altísimos dignatarios de su estructura.

 

Tempora non vacant, el tiempo no descansa.

 

 

EL cardenal Pell, prefecto de la Secretaría de Economía del Vaticano que se había apartado del ejercicio del cargo para afrontar la acusación y su defensa en juicio, ha sido declarado culpable de abusar sexualmente de dos monaguillos en los años 90, según la prensa australiana que asegura haberse emitido un veredicto unánime de culpabilidad por el tribunal de Melbourne.

 

 

El cardenal Keith O’Brien, que fue primado de la Iglesia católica de Escocía, fue sancionado por la sede apostólica con la pérdida de todos sus derechos, honores y responsabilidades clericales y recluido en un monasterio en 2015, a causa de sus conductas sexuales hacia sacerdotes de su diócesis. Murió en marzo de este año 2018.

 

El cardenal Theodore Edgar McCarrick ha renunciado a petición papal el 28 de julio de este año a su estatuto y condición cardenalicia a causa de comprobados y continuados abusos sexuales a seminaristas sometidos a su jurisdicción. Había sido sido arzobispo de Washington.

 

El cardenal Francisco Javier Errazuriz Ossa, arzobispo emérito De Santiago de Chile ha sido apartado el 15 de noviembre de 2018 del Consejo de Cardenales creado por el actual pontífice para asesorarle en la reforma de lo órganos de gobierno de la Iglesia. La salida trae causa de la crisis de los casos de crímenes sexuales de clerigos chilenos y el papel encubridor de los jerarcas de la Iglesia en aquel país.

 

El cardenal George Alencherry, primado De la Iglesia católica de rito Siromalabar, en la India, ha sido cesado el 23 de junio de este año por el Papa pues está siendo sometido a investigación por la justicia civil por corrupción, abuso de confianza y malversación de fondos. 13 millones de dólares en operaciones sospechosas de compraventa de tierras. 500 sacerdotes firmaron un manifiesto exigiendo la destitución el cardenal.

 

El cardenal Barbarin, arzobispo de Lyon será juzgado por un tribunal del brazo secular, acusado de haber ocultado los crímenes sexuales de alguno o algunos clérigos de su diócesis.

 

Rechazo absoluto de los pederastas y sus encubridores en la institución eclesiástica católica. Dicho esto: Millones de católicos ( incluso abogados en ejercicio) y miles de presbíteros, diácono y religiosas, trabajamos gratuita y denodadamente paliando miserias y combatiendo injusticias. La sagacidad del palomar evangélico,  obliga a preguntarse porque llevamos largos meses en los que los medios financiados por el Forbes de ricos y famosos machaca con casos de crímenes sexuales de clérigos de vetusta actualidad. Las políticas de Trump, Macron, May, Salvani, Sánchez, Merkel, Putin y quienes aparecen como mascarones de proa de los que son dueños del ochenta por ciento de la riqueza en nuestro mundo, ¿no tiene nada que ver con el cerco de pederastia a todas horas contra esa tarea de ocultas gentes y de la rompedora y tranquila batalla de Bergoglio contra la barbarie de poderosos, ricos sin alma y dictadores vestidos de paisano?. No me dejo engañar.

 

 

Considero que las noticias negativas que nos llegan a diario sobre la organización que se atribuye el seguimiento de Jesús el Galileo y el control de Dios requiere algunas notas aclaratorias para no perder el norte y terminar cuál hooligans favorables o contrarios a aquella que ha conformado la cultura occidental e influido decisivamente en las otras.

 

 

 

En defensa consciente y segura de los miles de seguidores, todavía hoy, de Jesús de Nazaret, que ayudamos, acompañamos, defendemos y sostenemos a varios millones de ciudadanos españoles para quienes los servicios de las Administraciones públicas se quedan en las páginas de sus respectivos boletines oficiales y a los que la propiedad de los bienes productivos y de comercio y consumo, aherroja en la pobreza más o menos grave.

 

1/ Simone Weil, filósofa francesa que se hizo bautizar en la Iglesia católica poco antes de morir en 1943, escribió: “Las Asociaciones con pretensiones divinas, como la Iglesia, resultan más peligrosas por el simulacro de bien que contienen que por el mal que las ensucia”.

 

2/ Las religiones, todas, son un producto humano, hecho por manos de personas humanas.

 

3/ No es lo mismo, aunque los profesionales de las religiones pretendan hacerlo pasar por moneda de curso legal, hablar del Misterio absoluto en el que existimos que hablar de religión. Lo más exacto que podemos decir de Dios en sí mismo, es que no podemos conocerlo, porque esta mas allá de todo cuanto puede alcanzar nuestra razón.

 

4/ Para Heisemberg la fuente de la fuerza magnética que orienta la brújula es el orden central de cuanto existe. Ken Wilber, editor de “La verdad habita en las profundidades” reproduce su respuesta a la pregunta que le formula en el libro, “¿Podemos, puede alguien, alcanzar la razón central de las cosas de cuya existencia no parece haber duda, de un modo tan directo como podemos alcanzar el alma de otro ser humano?”. Así planteada la pregunta, mi respuesta sería SÍ, contesta Heisemberg.

 

5/ Paul Ricoeur, antropólogo y filósofo francés fallecido en 2005, llama proceso de conversión diabólica a aquel en que el Absoluto, el Trascendente, la Fuente de la fuerza magnetica, degenera en objeto al convertirse en representación fabricada por una religión.

 

6/ Las religiones hablan en imágenes y en parábolas y, unas y otras, nunca pueden corresponderse plenamente con las realidades que significativamente tratan de expresar.

 

7/ Los científicos más conspicuos saben perfectamente que lo que podemos afirmar científicamente con claridad y exactitud es poco menos que nada. “Si tuviéramos que dejar de lado todo lo que no está claro, muy probablemente nos veríamos obligados a formular una serie de tautologías triviales desprovistas completamente de interés “.

 

8/ En De Legibus Cicerón defendía en los años de Senado y Republica, que en el sistema de las viejas leyes constitucionales romanas – con su rígido espíritu conservador – cada una de ellas, cada ley concreta, estaba justificada con el objetivo de que el poder se mantuviera en manos de la clase dirigente. Roma se sumergió en el torrente de la historia. Los imperios cayeron. La Unión Europea posee un Parlamento democrático. Pero Cicerón continúa recordando que el poder se mantiene en manos de la clase dirigente. Gracias entre otras cosas a las leyes.

 

9/“Avergonzaos, vosotros que retenéis el bien de los demás. Imitad la justicia de Dios y no habrá ya pobres.” No nos cansemos en amontonar bienes y tener reservas, cuando otros están agotados por el hambre. No nos hagamos meritorios del reproche amargo y de la amenaza del profeta Amos: “Escuchad esto, los que aplastáis al pobre y tratáis de eliminar a la gente humilde, vosotros, que decís: ¿Cuándo pasará la luna nueva, para poder vender el trigo; el sábado, para dar salida al grano?” (Am 8,5)… San Gregorio Nacianceno (330-390), obispo y doctor de la Iglesia. Homilía 24-26; PG 35, 890-891.