Clara Guzman

Clara Guzmán.- Claro que una cosa te voy a decir, que hay gente que va a Urgencias por chuminás y las “acolapsa”, que diría Lopera.

Clara Guzmán.- ¿Te acuerdas aquella vez que íbamos las dos del bracete y nos dijeron: “La más guapa, la de en medio”

Clara Guzmán.- Meditaré para seguir cobrando/soportaré los mantras y jamás me rendiré/ y aunque prefiera irme de birras o al Ikea/ soy funcionario de la Junta/ y a la Susi votaré/ Meditaré…

Clara Guzmán.- ¿Pero no te has enterado? Han puesto a plan a los legionarios, que resulta que están fondones.

Clara Guzmán.- ¿Y lo de los vestidos, bueno, los no vestidos de la Cristina Pedroche, que tienen delito, eso los castiga también el karma?

Clara Guzmán.- ¡Vaya nochecita! Mi nuera, cuando saqué el pavo, no paraba de decir: ¿Le has echado cúrcuma? ¿Le has echado quinoa? ¿Y jengibre?

Clara Guzmán.- He leído que un médico de Canadá ha dicho que los hombres sufren más que las mujeres cuando caen enfermos. Por una cosa de sus hormonas.

Clara Guzmán.- Dime lo que quieras, María Auxiliadora, pero haz el favor de no poner el dedo índice tieso ni la boca floja como el gachó ese del cartel de la Navidad.

Clara Guzmán.- ¿Pero tú te has fijado que ahora hay hasta caníbales en la prensa? me refiero al periodista Jair Domínguez, ese que se quiere comer a Zoido.

Clara Guzmán.- Carmena me ha quitao la ilusión que yo tenía de ir a Madrid todos los findes de diciembre y darme esos voltios por las calles hecha una reina.