Comunicación

Pero ese sábado 30 de marzo José Antonio no estaba ya en condiciones de hablar mucho. Mantenía los ojos cerrados, aunque sabíamos que escuchaba.

Muchas cloacas de todo tipo que destapar y no hay mejor medalla para un periodista que ser atacado por aquellos que se ven afectados por sus informaciones.

Claro, ella no vetó, mandó a obedientes sirvientes a que lo hicieran en su nombre, sin usarlo.

Se apagó una de las voces más queridas, reconocidas y admiradas de la radio sevillana y andaluza durante cuatro décadas de vida profesional en activo.

Para la APS la petición de amparo de Fernando Morillo, supone un ataque directo a la libertad de información y de expresión del periodista Pepe Fernández.

Siempre habrá periodistas incómodos. El periodista ha encontrado la forma de adaptarse a la cultura digital sin sacrificar su esencia. No lo olvidemos.

El cambio en la Consejería de Empleo y la reclamación de millones públicos mal utilizados por UGT-A, claves del nerviosismo y los ataques a periodistas.

UGT Andalucía ha remitido escrito a la Asociación de la Prensa sevillana quejándose de las críticas vertidas sobre ellos por el periodista Pepe Fernández.

Que no haya nadie con miedo a perder el sustento si se le ocurre publicar algo "cuando no es el momento" porque "no se puede hacer leña del árbol caído".

Siempre que vayamos al pasado lo veremos con ojos del presente. La historia es anacrónica, se significa en el futuro. Construyamos juntos la agenda de 2019.