Sevilla, Ciudad de la Poesía
La tertulia “Las setas”, al tiempo que celebraba un homenaje a Luis Cernuda en las efemérides de su nacimiento, decidió pedir a las instituciones que consideren formalmente la declaración de Sevilla como "Ciudad de la Poesía".
Aunque es invierno, he hallado rosas en Sevilla
Rubén Darío
Decía Fray Luis de Granada que a él se le antojaba el paraíso como una larga e interminable tertulia. Hay siempre, por lo tanto, un pedazo de placentera eternidad en esa, según la Real Academia de la Lengua Española, reunión de personas que se juntan habitualmente para conversar sobre un tema. A raíz de la presentación de un libro mío un grupo de amigos decidimos crear una tertulia donde recrearnos mediante la palabra en nuestros íntimos regocijos literarios y el amor a Sevilla, que brota en nuestras almas, al igual que a un romántico poeta, in mezzo’l cuore, ya que Sevilla es una categoría poética, como afirmó acertadamente Francisco Morales Padrón que sabía, como Novalis, que la poesía es la realidad última. Lo escribió Juan Ramón Jiménez en su ‘Diario de un poeta recién casado’: «En la primavera universal, suele el Paraíso descender hasta Sevilla», abundando al modo de Baudelaire en el complejo arte de saber perderse en las ciudades, porque como nos dice un poeta hispalense en Sevilla parece que en cualquier plaza o calle siempre nos espera alguien que nos ama. Se vive la ciudad, nos cuenta Noelia Domínguez, como realidad, pero, a la vez, como evocación, recuerdo o proyección. Acaso como si brotara de ella misma un imparable impulso creador. Ya se pronunció Julián Marías sobre los encantos hechizantes de la ciudad: «En Sevilla los siglos se escapan con huidiza elegancia».
Rubén Darío viajó a Sevilla en 1904 en busca del alma de la ciudad. «Aunque es invierno, he hallado rosas en Sevilla», escribe ya seducido desde el primer momento en ‘Tierras Solares’. Darío aparta lo pintoresco, el sedimento colmatado por tanto viajero que le precede y anota: «El encanto íntimo de Sevilla está en lo que nos comunica de su pasado». Mirando hacia atrás en el tiempo se descubre pronto la raíz literaria. Almutamid conoce a su esposa la poeta Rumaykiyya, la reina Itimad, a orillas del Guadalquivir al responderle con un verso y crea justas poéticas en la corte del Alcázar mientras beben vino con almendras y dátiles a pesar de la ley seca del Profeta.
Porque nuestra ciudad siempre ha amanecido para el amor y la poesía. La capital andaluza vio nacer a poetas de gran relevancia en la literatura española, como Gustavo Adolfo Bécquer, el poeta romántico por excelencia, y Antonio Machado, Aleixandre o Cernuda, entre tantos, cuyos versos perduran en la memoria e historia española. No obstante, el papel de Sevilla en el mundo de las letras no termina ahí. La ciudad hispalense también fue el escenario de la creación de la importante Generación del 27, formada por grandes figuras literarias como Federico García Lorca, Pedro Salinas, Dámaso Alonso, Vicente Aleixandre, Jorge Guillén, Rafael Alberti, Gerardo Diego y Luis Cernuda. Fue en esta ciudad donde estos ilustres poetas se reunieron en unas jornadas poéticas para conmemorar la muerte de Luis de Góngora, formando así la Generación del 27.
Por esa tradición histórica y cultural que atesora la ciudad en el ámbito de la lírica y de sus ilustres hijos que en todas las épocas crearon universales obras literarias, es por lo que la tertulia “Las setas”, al tiempo que celebraba un homenaje a Luis Cernuda en las efemérides de su nacimiento, decidió pedir a las instituciones que consideren formalmente la declaración solemne de Sevilla como CIUDAD DE LA POESÍA.