El psiquiatra sevillano no ha sido declarado ‘inocente’ por la Justicia, como algunos han querido hacernos creer. Le han acusado de delitos no investigables por haber prescrito
Un auto judicial archivando casi todas las denuncias presentadas contra Javier Criado ha causado alboroto en las últimas horas en Sevilla. Sus amigos han echado las campanas al vuelo. Otros, las denominadas víctimas, han guardado silencio y algunas han soltado algunas lágrimas de rabia e impotencia.
Sus abogados, no obstante, han destacado en una nota de prensa este titular: “La Fiscalía ve ‘serios indicios de culpabilidad’ en Criado, pero el Juez cree prescritos la mayoría de los delitos”.
Y, en general, a la opinión pública no le ha sorprendido que Su Señoría, sin entrar en las oscuras profundidades de la temática denunciada, opte por aplicar la Ley y elimine con un auto judicial siete de las ocho denuncias que pesaban sobre el psiquiatra sevillano. Las acusaciones eran graves: un delito continuado de intrusismo profesional, un delito de omisión del deber de socorro, un delito continuado contra la integridad moral, tres delitos continuados de abuso sexual, dos delitos de abuso sexual, y uno de inducción al suicidio.
[blockquote style=»1″]Javier Criado Fernández no ha sido declarado inocente por la Justicia como algunos han querido hacernos creer. Tampoco le ha señalado como culpable.[/blockquote]
La juez decide que el procedimiento no debe seguir adelante no porque considere que el Sr. Criado no ha sido autor de los delitos que le imputan sus víctimas. En eso no entra la magistrada, cosa que sí ha hecho la Fiscalía, que ve «serios indicios de culpabilidad». Lo hace porque los delitos, todos excepto uno –contra la integridad moral en 2015–, habrían prescrito. Que nadie, por tanto, se lleve a engaño y considere que el psiquiatra ha sido víctima de una caprichosa oleada de ocho denuncias falsas por ocho mujeres que nada tenían que hacer en sus ratos libres.
De la posible falsedad o veracidad de lo denunciado parece que nunca lo sabremos, entre otras cosas si no prospera el recurso de los abogados de las víctimas ante la Audiencia en el que aplican, más que el texto de la Ley, su espíritu y el sentido común. Una víctima con este tipo de perfil, argumentan, necesita más tiempo del legalmente establecido para poder afrontar, nuevamente, el infierno sufrido en su pasado, formalizando una denuncia con garantías sobre los hechos. Según los abogados son hechos que “se llevan produciendo más de 30 años, son constitutivos de un delito continuado, cuya prescripción no debe señalarse en función de la fecha en que ocurrieron sino desde que las víctimas han tenido capacidad para entender lo que les había ocurrido y el daño psicológico producido”.
Esta semana los abogados de las víctimas presentarán formalmente el recurso contra el archivo dictado por la Juez instructora, al tiempo que anuncian desde la Asociación Veritas que continúa adelante la recopilación de documentación por parte de 32 mujeres más que, en su momento, formalizarán su denuncia ante la Justicia, ratificando sus manifestaciones ante la Comisión Deontológica del Colegio de Médicos. De momento, el penalista Baena Bocanegr,a como defensor de Criado, se apunta el primer tanto en este largo proceso que, por lo que se dice, aún no ha terminado.
Javier Criado Fernández no ha sido declarado inocente por la Justicia como algunos han querido hacernos creer. Tampoco le ha señalado culpable. Sencillamente le han acusado de delitos que legalmente no se pueden investigar por haber prescrito.