En medio del acoso que Ciudadanos ha iniciado contra sus “socios” del PP allí donde antier lograron acuerdos, mientras van cayendo ediles a golpe de sms de Rivera desde Madrid, al presidente de los populares andaluces no se le ha ocurrido otra cosa que abrir un frente en su propia casa. Que digo en su casa, en su mismísimo dormitorio si me apuran. Juanma ha abierto el melón sucesorio en el PP de Málaga.
En una de esas jugadas inducidas por Elías Bendodo, presidente del PP provincial e impaciente aspirante a sentarse en el sillón de la Casona del Parque malagueño cuando se levante don Francisco, Bonilla ha entrado al trapo y le ha propuesto a Paco de la Torre, alcalde desde hace 16 años, su jubilación anticipada como tal.
No le ven candidato en 2019, con 76 años que cumplirá entonces, como el cartel que el PP necesitará para mantener su alcaldía más importante en estos momentos. Una incógnita que De la Torre no despejaba ni en sueños y cuando alguien le ha preguntado en público ha dicho que mientras tenga salud, el cariño de la gente, ideas para Málaga y ganas de trabajar él aguantará y cumplirá su compromiso de concluir este periodo de cuatro años en el cargo. No parece, por tanto, muy dispuesto permitir la promoción de quien le sustituya como candidato en el año 19.
No en vano Paco de la Torre es el político en activo más veterano del firmamento político español, habiéndose llegado a sentar en las Cortes como procurador por el denominado Tercio Sindical. A pesar de sus orígenes, de la Torre ha sido un ejemplo de evolución, siempre en el centro político, siempre defendiendo la democracia y ejerciendo como demócrata.
Pero De la Torre ha dicho que no. Todo un portazo en las narices del jefe de filas de los populares andaluces en su propio feudo, donde tras la negativa del alcalde las cosas parecen que no serán igual que hasta ahora.
Quizás porque el alcalde es un político que viene de vuelta, que tiene los colmillos retorcidos por tantas cosas que ha vivido y defendido, Moreno Bonilla se ha acercado a su derribo como alcalde con un argumentario impecable, con ganas de agradarle al oído. Ofrecerle el Congreso como colofón a su carrera.
Tras declinar encabezar la lista al Congreso el alcalde de Estepona, José María García Urbano, y descartada Celia Villalobos como cartel malagueño del PP, Bonilla y Bendodo decidieron ofrecerle a Paco De la Torre dejar la alcaldía y concluir su dilatada carrera política como diputado en el Congreso, liderando la lista del 26J. Si se lograba el objetivo quedaba la vía libre para que el actual presidente de la Diputación, Elías Bendodo, rodara durante tres años como alcalde para 2019.
Pero De la Torre ha dicho que no. Todo un portazo en las narices del jefe de filas de los populares andaluces en su propio feudo, donde tras la negativa del alcalde las cosas parecen que no serán igual que hasta ahora. ¿Alguien imagina a un socialista diciendo no a una propuesta hecha pública por Susana Díaz? He ahí un matiz de liderazgo a tener en cuenta con Bonilla.
El fallido ofrecimiento del PP al alcalde de Málaga ha abierto en canal el llamado melón sucesorio, entre otras cosas porque la oferta llevaba implícito el mensaje que Paco De la Torre está amortizado para el PP.
Mientras todo esto ocurre en Málaga, en Granada Ciudadanos le entregaba la alcaldía al PSOE. Un aviso para el PP malagueño, a lo que hay que sumar la relación tensa que De la Torre mantiene con Juan Cassá, el portavoz de C´s que tiene la llave del gobierno municipal. ¿A qué bando apoyarán los naranjitos?
El nombre de Carolina España, según ha contado el periodista Antonio Montilla en Sur, es el que se abre paso para que finalmente encabece el cartel electoral al Congreso. Un puesto que ha venido circulando en el PP malagueño como la farsa monea, que de mano en mano va y ninguno se la queda.