Los flujos migratorios irregulares como uno de los mayores factores de riesgo para España.
En el año 2023, los datos de flujos migratorios irregulares de entrada a España registraron un aumento del 95 % respecto al año anterior.
Tal y como ha sido publicado recientemente en numerosos medios, tres informes de Seguridad Nacional alertan sobre el posible uso hostil de la migración irregular contra España. En uno de estos informes se recoge que la nueva Estrategia de Seguridad Marítima señala el riesgo de que “actores estatales” utilicen “olas incontroladas de emigrantes” para desestabilizar a España, y se suma a otros dos recientes documentos de Presidencia del Gobierno que ya apuntaban a ello.
En otras palabras, el Gobierno reconoce abiertamente que los flujos migratorios irregulares, esto es, inmigración ilegal, es una amenaza para la seguridad nacional. Estos informes afirman que la inmigración irregular puede ser instrumentalizada de forma desestabilizadora contra los Estados.
Si nos detenemos a analizar el Informe de Seguridad Nacional del año 2023, podemos contemplar como por cuarto año consecutivo, la percepción de la previsible evolución del contexto de Seguridad Nacional con un horizonte temporal de cinco años es de importante deterioro.
Los resultados colocan algunos elementos en el rango de los riesgos y las amenazas que muestran un grave deterioro, como son la vulnerabilidad del ciberespacio o los flujos migratorios irregulares, entre otros.
Analizando el informe, en el año 2023, los datos de flujos migratorios irregulares de entrada a España (56.039 inmigrantes) registraron un aumento del 95 % respecto al año anterior ( 2022 ). Las llegadas por vía marítima a España aumentaron un 91%.
De los 10 últimos años (2013-2023), 2023 ha sido el segundo con mayor número de llegadas, sólo superado por 2018. En 2023, destaca octubre, como el mes con mayor número de llegadas, con un total de 17.328 inmigrantes, la mayor parte de ellos llegados a las islas Canarias procedentes del Sahel.
Si bien, la tónica habitual es el incremento incontrolado que se sucede desde 2018 y que prosigue desde 2020 año en el que llegaron irregularmente a España 41.875 personas migrantes, un 29,6% más que en 2019.
En cuanto al origen de las llegadas a España en 2023, la presión migratoria provino principalmente de Marruecos, Senegal y Argelia, además de subsaharianos no identificados (Indica el Informe que probablemente son de Mali, Guinea o Gambia). A 31 de diciembre 2023 habían llegado por la ruta atlántica 40.403 emigrantes irregulares (+161%). De ellos, un 44% sin identificación de nacionalidad, un 17% de Senegal, un 14% de Marruecos y un 6% de Mali. Si comparamos los datos con el período 2020-2022, en esos años la presión migratoria en España provino principalmente de Marruecos, Argelia, Guinea, Costa de Marfil, Mauritania y Senegal, así como de los países interiores del Sahel.
Para hacer frente a la gestión de los flujos migratorios irregulares, España utiliza diferentes herramientas, que se pueden dividir en tres grupos:
1- La atención a los inmigrantes en territorio español;
2- La vigilancia y control de fronteras nacional;
3-La cooperación con países de origen y tránsito.
Respecto al primer grupo, existen dos programas para la atención de los inmigrantes que llegan a nuestro país. Por un lado, está el programa de atención humanitaria y, por otro, el de protección internacional.
El programa de atención humanitaria, sufrió su mayor nivel de estrés en el mes de octubre, debido a la masiva llegada de inmigrantes procedentes del Sahel a las islas Canarias. Por esta razón, se estableció una “Declaración de Emergencia” que permitió dotar al sistema de más de 6.000 plazas extra, de forma que se han alcanzado más de 12.000 plazas de contingencia .
En 2023 se reasentaron en España a 1.039 personas, de las que 933 fueron de nacionalidad siria. De ellas, 302 vinieron desde Turquía, parte de las personas afectadas por los terremotos. El resto de los sirios reasentados en España en 2023 vinieron desde Líbano.
Respecto al programa de protección internacional, en 2023, la Oficina de Asilo y Refugio (OAR) del Ministerio del Interior ha recibido 163.218 solicitudes de protección internacional, un 37% más que en el año anterior y la mayor cifra desde la creación de la oficina en 1992. Actualmente, España es el tercer país de la UE que más solicitudes de asilo recibe, solo por detrás de Alemania y Francia.
Se han concedido 7.521 estatutos de refugiado, cifra récord hasta la fecha.
Las cinco primeras nacionalidades de las personas a quienes se les ha concedido estatuto son Afganistán, Siria, Nicaragua, Colombia y Honduras. Se ha tramitado también la protección subsidiaria para 3.850 personas, procedentes principalmente de Mali.
Nota Informativa : Artículo conformado exclusivamente analizando los datos del Informe de Seguridad Nacional 2023, no contemplando opinión personal al respecto.