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Pasión y crucifixión de Braulio Medel

Tras hablar con Juan Espadas que le remitió al ministerio de Nadia Calviño, el presidente de la Fundación Unicaja se rinde en Jueves Santo.

 

Eligió el día más significativo de la Semana de Pasión, el Jueves Santo y fue después de sus más íntimas reflexiones en su particular Getsemaní cuando lanzó un comunicado anunciando su rendición por culpa de las presiones padecidas y por el juego sucio contra él, utilizando los medios de comunicación con «campañas mediáticas hostiles prolongadas en el tiempo» según las define. Él, que ha sobrevivido como tiburón financiero durante décadas gracias precisamente  a un habilidoso manejo de los medios de comunicación y de periodistas, con cantidades millonarias de por medio, supuestamente destinadas a publicidad y patrocinios, ha acabado tomando su propio brebaje letal.  

Braulio ni siquiera a la hora de irse ha sido original, eligiendo el mismo momento que empleó Rodríguez Zapatero un Martes Santo de 2009 para relevar a Manolo Chaves dejando a Pepe Griñán solo, frente la herencia envenenada de los Eres.

 

El PSOE-A deja de apoyarle

Braulio Medel Cámara agotó los días de Pasión para comunicar el jueves, en pleno arranque del Triduo Pascual,  una decisión que debió empezar a madurar en serio semanas atrás, en la mismísima calle Sierpes de Sevilla, plena Carrera Oficial de la Semana Santa, donde Unicaja tiene desde hace décadas su señorial sede en la capital de Andalucía, aledaña a la no menos señorial sede del elitista Real Club de Labradores de Sevilla. 

Por una oportuna foto de Rocio Ruiz en el diario Sur supimos que Medel, tras el demoledor misil lanzado días antes por la ministra Nadia Calviño contra su gestión y su honorabilidad, había celebrado una reunión «secreta» con Gaspar Llanes, Secretario de Transformación Económica y Digital del PSOE-A, el partido que encumbró a Medel a la cúpula financiera andaluza y española. Primera reunión con el hombre que Juan Espadas ha puesto en su ejecutiva para tutelar todo lo relacionado con el largo nombre de su cargo orgánico. La reunión se habría celebrado precisamente en la sede de Sierpes y a la salida se pudo ver y retratar a Llanes. Preguntado por los periodistas el apurado interpelado confesó que había ido a «unas gestiones» en la sucursal del banco – dios, ¿qué entenderá esta gente por transparencia?- pero en la foto que le hicieron la carpeta verde de la que era portador lucía muy clarito el nombre de la Fundación Unicaja. 

Distintas fuentes consultadas confiesan desconocer lo tratado por Medel y Llanes en aquella reunión, aunque interpretan que significó un último intento de BMC por mantenerse al frente de Fundación Unicaja, intentando pactar una salida honrosa tras haber sido humillado en público y que no era otra que agotar su mandato hasta el otoño. 

 

Braulio Medel también llamó a Juan Espadas

Según me revela otro patrono (no enfrentado a Medel pero crítico con su forma de conducir esta crisis) también habló Braulio Medel con Juan Espadas volviendo a escuchar los argumentos ya conocidos de antemano vía Llanes, que se traducían en adelantados lavados de pies y manos. ‘Nosotros no decidimos, eso solo está en manos de la ministra Nadia Calviño’ debió ser el mensaje final. De ahí que Medel también haya mantenido contactos a la desesperada con gente de Economía en Madrid, donde la respuesta de la vicepresidenta no había variado un ápice, máxime con las antenas desplegadas en los bancos de España y Central Europeo a causa del ruido generado en Málaga con Unicaja. Ruido acrecentado tras publicarse las declaraciones del presidente de la Junta exigiendo públicamente a la titular de Economía la cabeza de Medel al frente de la rica fundación bancaria andaluza. Poco antes, el número dos del PP-A y de la Junta, Elias Bendodo, lanzó a su viejo amigo Braulio la elegante y discreta sugerencia de que diese «un paso al lado». Para que todos lo entiendan, que se marchara, pero Braulio no lo entendió o hizo oídos sordos.

«Braulio no se va matando, se va protegiéndose» cree un patrono de Unicaja de los que ha estado frente a las tesis de Medel en la gobernanza de la entidad. 

Recuerda que Braulio ha conocido y dirigido muchas guerras y sabe que en este tipo de conflictos los inspectores auditores conforman comandos tan eficaces a la voz de mando que nunca fallan a la hora de encontrar lo que interesa que busquen y encuentren, por grandes que sean los armarios de Braulio y oculten o no carnaza civil, penal o militar. Le pregunto si cree que ha existido ‘gota de agua’ que colme el vaso del banquero oriundo de Marchena para anunciar que entrega la cuchara y me dice que no se trata de una gota, que su vaso se llenó y rebosó con el manguerazo lanzado con el informe destructivo del ministerio donde se ponían en duda sus capacidades personales para seguir tutelando más del 30% del capital del quinto banco español por volumen de activos, a través de Fundación Unicaja y sus consejeros dominicales nombrados bajo su criterio y control.

 

Vuelve la canción «Despolitizar la gestión»

Para estas fuentes, el canto del cisne de Braulio ha comenzado y al mismo tiempo que anuncia que se va deja en el ambiente la letra de la canción que tarareó durante años como presidente ejecutivo de Unicaja -Despolitizar la gestión- una verdad a medias ya que él fue el primero que usó política y políticos para sus fines y objetivos. Efectivamente la politización, el viejo fantasma que acabó con la mayoría de cajas y que no fue otro que la descarada ocupación de la política de entidades financieras que en teoría eran de todos, amén de verse salpicadas o imputadas por la corrupción de la peor especie. 

Con sus consejos de administración plagados por paniaguados de la política, sindicalistas que olvidaban sus oficios por la de años que permanecían como consejeros, canonjías para gente más bien inútil pero que, normalmente, sabían demasiado y no precisamente sobre Derecho Mercantil. Eso sí, todos acababan haciendo másteres domésticos sobre los prósperos negocios de amigos, amiguetes, parientes y conmilitones de partido.

Braulio en el momento de su marcha, al tiempo que levantaba una bandera blanca rota y amarronada por el fango que dice que le han lanzado en estos meses, ha querido  dejar constancia de que la vida (política) sigue igual que en el pasado, que no aprenden, que los políticos siguen poniendo y quitando a quienes deben estar al frente de entidades que se rigen por sus propias normas, sus estatutos y el mercado. Algún colega ya se ha hecho eco a la hora de promover la tesis de Medel, por cierto la comidilla entre algunos patronos porque se nota mucho «la mano de Braulio». 

Quien que se llegó a considerar un cruzado contra el intervencionismo político en las cajas, pese a haber llegado de la mano de unas siglas muy concretas y haberlo intentado disimular, acaba su larga trayectoria demostrándonos que al final el morlaco, tantas veces toreado, le ha empitonado de gravedad, como a Paquirri en Pozoblanco, llevándole directamente a la enfermería. Le quedaba solo una salida estrecha y dolorosa que no estaba dispuesto a soportar, quedarse pero afrontando una auditoría a fondo de su gestión, de su persona y seguramente sin anestesia. El Jueves Santo decidió comunicar que ha optado por cortarse la coleta y mandó el comunicado.

 

A ver qué hace ahora la Fiscalia

Todo ello sin olvidar que no están cerradas ni mucho menos las dos diligencias de investigación que instruye Fiscalía a denuncias del movimiento ciudadanos por Unicaja con Pedro Moreno Brenes al frente y el sindicato CIC , el mismo que metió a Rodrigo Rato en la cárcel y que acusan a Medel de haber cometido presuntos delitos de estafa, apropiación indebida, administración fraudulenta o desleal y contra la Hacienda Pública. Denuncia de 30 páginas presentada en marzo de la que no se tienen noticias de que se haya judicializado ante el órgano judicial malagueño correspondiente.

Pese al grito más electoral que sonoro lanzado por Juan Manuel Moreno Bonilla pidiéndole a Calviño que echase a Medel y que provocó la filtración inmediata del informe de Economía contra Braulio -la puntilla- en términos políticos convendrá dejar sentado que ha sido el propio PSOE el que ha sacrificado a uno de los suyos, a su distinguido peón en el sector financiero, con tantos años de servicios prestados, muchas veces impagables. Algo que en el partido no tiene que haber dolido especialmente ya que el banquero, una vez consolidado en la presidencia de Unicaja, siempre fue un personaje apoyado y avalado por el PP de Elias Bendodo en Málaga y Javier Arenas desde Sevilla. Relaciones que siempre levantaron recelos entre muchos de sus compañeros socialistas.

La dimisión anticipada de Medel en la presidencia de la fundación antes del otoño no ha sido concretada con exactitud, dejándola sujeta a una «transición ordenada» de poderes «tras un corto espacio de tiempo» que no perjudique a los intereses de la entidad. «Formalizaré mi renuncia, que ahora anuncio, luego de un breve período de tiempo que permita, en interés exclusivo de la Fundación Bancaria, una transición ordenada». 

No obstante, aclara,  que «la formalización de dicha renuncia será con anterioridad a que se lleve a término lo indicado en el escrito del Ministerio y con independencia de su contenido». 

Recuérdese que lo que se ordena desde el Protectorado de Fundaciones del Ministerio es examinar si don Braulio está en las condiciones adecuadas para gestionar el 30% de la Fundacion en Unicaja Banco. La literalidad de la orden es ésta: «encargar un informe sobre gobernanza a una entidad independiente de primer nivel y con amplia experiencia, elegida por acuerdo de todos los miembros del Patronato asistentes, que, entre otras cosas, se pronuncie expresamente sobre si D. Braulio Medel sigue reuniendo los requisitos para ostentar el cargo de patrono que establece el artículo 40.1 de la Ley 26/2013, de 27 de diciembre, los artículos 10 y 22 de los Estatutos y los artículos 10 y 18 del Reglamento del Patronato de la Fundación, en particular la honorabilidad comercial y profesional e independencia, y si está ejerciendo sus funciones en beneficio exclusivo de los intereses de la fundación bancaria y realizando una adecuada gestión de su participación accionarial en Unicaja Banco, S.A».

 

Urge buscar la calma ¿en campaña?

Fuentes implicadas en la búsqueda de soluciones de futuro en la fundación cuentan que «lo primero que es necesario ahora es bajar el diapasón entre todos los patronos, impulsar una transición ordenada, tranquila y no seguir alimentando la crisis a través de los medios de comunicacion». 

No es descartable que este tipo de mensajes o parecidos ya hayan llegado, por la pertinente y oportuna vía, a los editores y medios interesados en que la facturación publicitaria de Unicaja no solo se mantenga, sino que aumente con la nueva situación por llegar.

Pero la guerra política que subyace en la cuestión Unicaja no es previsible que termine solo con la marcha de Medel y menos en plena cuenta atrás para una campaña electoral decisiva para muchos en muchos aspectos. No descartemos pues cargas de profundidad contra el bipartidismo Psoe-PP desde los extremos del arco político.

Hoy martes, 19 de abril, es la antepenúltima fecha de la que dispone Moreno Bonilla para celebrar elecciones en junio. Si las elecciones van a ser el domingo 12 de junio, hoy es el día de la disolución oficial. Si no lo hace este martes solo le quedarán disponibles las fechas del 26 de abril para que sean el 19 de junio o el 3 de mayo si la decisión es convocar a urnas el 26. 

El calendario aprieta y en las últimas horas han aumentado las apuesta por el 12 de junio. De ser cierto hoy se confirmará tras el Consejo de Gobierno y mañana se publicará en el BOJA.